La presidenta Claudia Sheinbaum anunció que durante su administración no habrá aumentos salariales para los altos funcionarios del gobierno, incluida ella.
Este anuncio se realizó en el marco de su compromiso con la austeridad y la transparencia en el uso de los recursos públicos.
Sheinbaum enfatizó que el salario nominal de la presidenta y de los altos funcionarios públicos se mantendrá sin cambios a lo largo de los seis años de su gobierno.
“Tomé la decisión de que no aumente el salario en los seis años que estemos aquí, tanto para la presidenta como para todos los funcionarios y servidores públicos de confianza de alto nivel”, declaró.
Además, la presidenta explicó que se implementarán ciertas reducciones presupuestarias en áreas donde aún es posible hacer ajustes sin afectar la operatividad de las dependencias y el funcionamiento del gobierno.
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Este enfoque busca optimizar el uso de los recursos públicos y promover la eficiencia en la administración.
El anuncio de Sheinbaum fue bien recibido por diversos sectores que valoran su compromiso con la austeridad y la transparencia. Sin embargo, también ha generado debates sobre el impacto de estas medidas en la motivación y retención de talento en el sector público.
