La decisión del Departamento de Comercio de Estados Unidos de cancelar el Acuerdo de Suspensión del Tomate con México representa un golpe estructural para una de las industrias agrícolas más importantes del país y pone en riesgo exportaciones y empleos, alertó Walberto Solorio Meza, presidente del Consejo Agrícola de Baja California.
En entrevista con Amexi, el dirigente expuso que la medida impactará directamente a Baja California, donde el 90 % del tomate producido —principalmente en el valle de San Quintín— se destina al mercado estadunidense.
Esta región, junto con Baja California Sur, aporta aproximadamente el 20 % del tomate que México exporta, lo que equivale a ingresos anuales de entre 500 y 600 millones de dólares.

“El Acuerdo de Suspensión ha sido clave para mantener la estabilidad en el comercio bilateral de tomate desde hace más de dos décadas. Su cancelación amenaza una industria que genera 2 mil 800 millones de dólares al año en exportaciones y sostiene hasta medio millón de empleos directos en el país”, declaró Solorio Meza.
Origen del conflicto por el tomate
El origen del conflicto se remonta a 1996, cuando productores del estado de Florida acusaron a los exportadores mexicanos de incurrir en prácticas de dumping.
Si bien se firmó un acuerdo para suspender medidas arancelarias, dicho instrumento fue revisado recientemente, y en su última evaluación, el gobierno estadunidense decidió no renovarlo, activando un arancel que complica el flujo comercial.
Lee: Tomate mexicano costará 21% más en EU si se aplica arancel: Julio Berdegué
Los productores piensan reducir la siembra del tomate
Solorio Meza advirtió que esta decisión ya ha comenzado a tener efectos negativos en la planeación agrícola.
“Productores que iban a sembrar 50 hectáreas ahora están reduciendo a 25 o 30. Esto tendrá un impacto inmediato en el empleo y en las cadenas productivas locales”, sostuvo.
La temporada de producción de tomate en Baja California va de mayo a diciembre, concentrándose en los valles de San Quintín, Maneadero, San Vicente y el Valle de la Trinidad.
El presidente del Consejo Agrícola indicó que muchas empresas están evaluando detener operaciones o buscar cultivos alternativos si no se logra una compensación financiera adecuada.
Buscan nuevo acuerdo con EU
Añadió que se encuentran en conversaciones con autoridades mexicanas y representantes legales para explorar mecanismos que permitan reactivar un nuevo acuerdo con Estados Unidos.
“Estuvimos recientemente en Washington y sabíamos que este escenario era posible. Hoy se requiere voluntad política y diplomacia para proteger a nuestras comunidades rurales y garantizar la continuidad de una industria vital para el país”, afirmó.
Finalmente, Solorio Meza subrayó que el tomate es el tercer producto agrícola más exportado por México.
Al ser un producto perecedero en un mercado sensible al precio, el consumidor estadunidense no absorberá los costos adicionales generados por el arancel, lo que, advirtió, puede desatar una crisis generalizada en el sector.