El humo volvió a subir al cielo de Roma. A las 03:51 horas tiempo central de México (11:51 tiempo en Roma), la chimenea instalada en el techo de la Capilla Sixtina volvió a emitir fumata negra, la segunda desde el inicio del cónclave el miércoles, indicando que las votaciones de esta mañana no arrojaron aún un nombre con los dos tercios necesarios para ser elegido Papa.
🔴 URGENTE: Humo negro en la segunda fumata en el #Cónclave. Han pasado tres votaciones y los #Cardenales no deciden quién será el nuevo #Papa. No hay consenso o el Espíritu Santo no está en la #CapillaSixtina. #Vaticano 🇻🇦#Cónclave2025. pic.twitter.com/T1t4eV4PLW
— Carlos Lara Moreno (@CarlosLaraM81) May 8, 2025
Un nuevo día, la misma señal: no hay Papa
Como es tradición, los cardenales electores celebraron dos rondas de votación esta mañana, en un clima de recogimiento, discernimiento y oración. Al no haberse alcanzado la mayoría requerida (al menos 80 votos de los 120 electores), las papeletas fueron quemadas junto con productos químicos que generaron la característica humareda oscura.
El procedimiento, completamente hermético, se rige por la Constitución Apostólica Universi Dominici Gregis, que regula cada fase del cónclave con precisión. Ni nombres, ni preferencias, ni detalles del debate pueden salir de las paredes de la Sixtina. Todos los involucrados han jurado secreto absoluto.
Decepción contenida en la Plaza de San Pedro
Miles de fieles, turistas y periodistas se congregaron nuevamente desde temprano frente a la Basílica de San Pedro. Equipados con paraguas, pancartas, rosarios y cámaras, observaron atentos la chimenea. Al ver el humo negro, se escucharon murmullos de resignación y aplausos tímidos. Muchos, sin embargo, permanecieron con esperanza.
“Cada minuto que pasa significa que los cardenales se están tomando el proceso en serio. Prefiero que se demoren a que elijan mal”, decía María Torres, una peregrina mexicana presente en la plaza.
Qué viene ahora
Esta tarde, los cardenales volverán a reunirse para celebrar dos nuevas votaciones. La próxima fumata se espera alrededor de las 19:00 (hora local). Si es blanca, significará que ya hay Papa. Si es negra, el proceso continuará mañana con otras dos rondas de votación por la mañana y dos por la tarde.
Históricamente, pocos cónclaves se resuelven en el primer día. El cónclave que eligió a Juan Pablo II en 1978 requirió ocho votaciones. El que eligió a Benedicto XVI en 2005 concluyó en la cuarta. Francisco fue elegido en la quinta.
Silencio y deliberación: los rostros detrás del humo
Dentro de la Capilla Sixtina, los 120 cardenales electores —procedentes de más de 60 países— evalúan con extremo cuidado los perfiles de posibles Papas. No hay campañas, ni discursos públicos, pero sí hay conversaciones, influencia y movimientos sutiles. Muchos observadores consideran que aún no hay un claro favorito.
“Estamos en una fase donde se están consolidando los bloques, y probablemente se esté midiendo el margen de aceptación de algunos candidatos”, explica el vaticanista italiano Marco Politi.
Entre los nombres que circulan en medios y análisis previos están cardenales de Italia, América Latina, África y Asia, aunque no hay confirmación oficial de ningún tipo desde dentro del cónclave.
La Iglesia católica sigue sin nuevo pontífice, pero el proceso avanza. Mientras tanto, el mundo mira hacia la pequeña chimenea del Vaticano, esperando que de su interior brote pronto la señal blanca que marcará el inicio de un nuevo capítulo para más de 1.300 millones de católicos en el planeta.