Francisco “Chihuas” Rodríguez nunca dejó de creer y, 11 años después, volvió a proclamarse campeón mundial.
Pese a ir contra el local e invicto Galal Yafai, el Chihuas Rodríguez dio una de las grandes actuaciones de su carrera y ganó por clara decisión unánime.
Y eso le valió, además de su recibir la parte de la bolsa que le tocaba, sumar más de 400 mil dólares en ingresos.
El CMB busca ayudar y mejorar las condiciones de los boxeadores, por lo que impuso una regla en las peleas mandatorias.
Es decir, el 90% de la cantidad subastada se divide entre los dos boxeadores y el 10% se guarda para el ganador.
La subasta fue por 222,222 dólares, por lo que el 10 % fue de 22,222 que fueron a la cuenta del Chihuas.
Chihuas Rodríguez asegura que vive su “segundo aire”
Feliz por esa situación y por ser nuevo campeón interino de las 112 libras, el regiomontano asegura que vive el segundo aire en su carrera.
“Vamos por más, este es solo el inicio porque vamos por el campeonato absoluto, y es mi segundo aire en mi carrera”, dijo el Chihuas.
Luego de 11 años de pedir la oportunidad, el Chihuas nunca perdió el objetivo final, y logró conquistar la corona.
“Me quedo con que uno no debe de bajar los brazos, uno no debe de quitar el dedo del renglón, uno debe de echarle ganas, no agachar la mirada porque si lo haces pierdes el objetivo; nunca dejen que les digan que no pueden, duden de lo que sea, menos de ustedes”, agregó.
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Luego de “atropellar” a Yafai y terminar con el reinado del campeón olímpico, en la mira del Chihuas está Kenshiro.
El japonés es campeón unificado del CMB y de la AMB en las 112 libras, y el objetivo del mexicano.
“Es durísimo, por eso es que hay que trabajar, para seguir dando ese espectáculo y gusto a la gente”, concluyó.







