Los Diablos Rojos del México (62-24) cerraron la temporada regular en casa con una victoria de 10-8 sobre los Olmecas de Tabasco (40-49), con lo que se llevan la serie por barrida y llegan a siete victorias de manera consecutiva.
Con lo anterior, la tropa roja se pone a una victoria de terminar la campaña por arriba del .700 de porcentaje de ganados, lo que lo convertiría en el primer equipo en la historia de la Liga Mexicana con dos temporadas consecutivas con porcentaje de .700.
La explosiva jornada se construyó con un rally de seis anotaciones en la segunda entrada, capítulo donde los Rojos tomaron una ventaja de 6-2, para después aumentarlo a 10-2 en el quinto rollo. Después de eso, los Olmecas intentaron armar un gran regreso al timbrar dos veces en la séptima entrada y cuatro ocasiones más en la octava.
José Marmolejos firmó una tarde de 4-4, con dos producidas y dos anotadas, incluido su séptimo jonrón del año.
Julián Ornelas se fue de 5-3, mientras Juan Carlos Gamboa de 3-3 con dos anotadas y Moisés Gutiérrez de 3-2 con par de timbradas.
En el pitcheo, el derecho Brooks Hall fue el pitcher ganador luego de trabajar cinco entradas de seis hits y dos anotadas, con una base y dos ponches. Al relevo llegaron cinco lanzadores, entre ellos Tomohiro Anraku (un inning sin anotación), quien llegó a 22 salvamentos.
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Frente a Bravos
Ahora, la novena capitalina viaja a León para enfrentar a los Bravos de martes a jueves en el Estadio Domingo Santana, con lo que terminará oficialmente la temporada regular. Después de eso, volverá a casa para abrir los playoffs el sábado 9 de agosto frente a un rival por definir.
