La seguridad de Jungkook de BTS se vio comprometida, luego que una mujer intentara irrumpir en su casa.
De acuerdo con la comisaría de Yongsan, se trató de una mujer de unos 40 años ingresó por el estacionamiento subterráneo a las 23:20 horas del sábado al edificio donde vive el idol.
De inmediato, un guardia de seguridad la detectó en las cámaras de vigilancia y alertó de inmediato a la policía.
Cuando la confrontaron dio declaraciones contradictorias, por lo que la policía inició una investigación para determinar sus motivos.
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Fans que cruzan los límites
Este es el segundo caso de allanamiento a la residencia de Jungkook, luego que en junio pasado, una mujer china intentó entrar en la propiedad el día en que el artista completó su servicio militar.
La policía la arrestó al intentar ingresar el código de la puerta; según informes, la mujer declaró que viajó a Corea «para ver a Jungkook después de su baja militar».
Esos incidentes dejan al descubierto un problema recurrente en la industria del K-pop: los fans “sasaeng” obsesivos que cruzan los límites y se entrometen en la vida privada de los ídolos.
Según la ley antiacoso de Corea del Sur de 2021, los infractores pueden enfrentarse a hasta tres años de prisión o multas de hasta 30 millones de wones (21 mil dólares).
Sin embargo, si se trata de armas u objetos peligrosos, las penas pueden ascender a cinco años de prisión o multas de hasta 50 millones de wones (34 mil dólares).
