Mauricio Sulaimán, presidente del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), vivió un momento especial este jueves, como si estuviera en un túnel del tiempo.
El mandamás del CMB recibió un reconocimiento póstumo en honor a su padre, Don José Sulaimán, algo que valora mucho.
“La función de boxeo del sábado es parte de un programa con otros deportes y ser parte de este movimiento para Reynosa es algo muy especial. Los Sulaimán Saldivar somos tamaulipecos de corazón, con un gran arraigo, una memoria eterna de momento especiales para mis hermanos, para mí”, dijo Mauricio.
Sus padres, Don José y Doña Martha, nacieron en Tamaulipas, y por eso este viaje a Reynosa fue especial para Mauricio, quien recibió un reconocimiento póstumo en honor a quien fuera presidente del CMB por 38 años.
“Mi papá cada vez que venía a Tamaulipas es donde veía a sus amigos, le decían Pepe, ahí no era José Sulaimán ni presidente, era Pepe. La vida nos llevó a compartir a mi papá con muchos hijos más que son ellos, los boxeadores, que desde que tengo uso de razón ocupan una parte importante de nuestra familia, viajaba mucho y en nuestra casa se convirtió en el hogar del boxeo”, agregó.
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Y todo lo vivido el jueves también fue un túnel del tiempo para Mauricio Sulaimán, quien estuvo presente en la conferencia de prensa de la función que encabezará Miguel “Alacrán” Berchelt.
Se dio tiempo para ir al Hospital Materno Infantil y llevar presentes a los niños que están internados, recibió el reconocimiento póstumo en honor a su padre, inauguró la exposición “Don José Sulaimán Chagnón, de vuelta a mis raíces”, y hasta vio el documental de Carlos Zárate y Alfonso Zamora.
“Es un túnel del tiempo”, dijo Sulaimán Saldívar, pues estar en Tamaulipas le trae recuerdos, pues sus padres se conocieron en dicho estado, en el que pasó muchos días de su niñez.
“Estoy metido en un túnel del tiempo en el que el recuerdo, los colores, es regresar a mi niñez, a mi juventud, mi presente y entender la grandeza de Tamaulipas, de México y de cómo el deporte del boxeo hace la diferencia y puede activar todo lo mejor en una sociedad, en unas personas que necesitan en cualquier momento, solamente una ilusión, una esperanza”, concluyó Sulaimán Saldívar.