Tráfico de tortugas en Chiapas: detienen a hombre con más de tres mil ejemplares en autobús
| Decomiso revela magnitud del problema
Un hombre identificado como José “R” quedó vinculado a proceso por el delito de tráfico de tortugas en Chiapas, luego de que agentes de la Policía Federal Ministerial lo detuvieran en la autopista San Cristóbal–Tuxtla Gutiérrez. Transportaba 3 mil 445 tortugas pavo real o hicoteas (Trachemys venusta) en cajas de cartón, sin autorización ambiental.
La detención se realizó tras una denuncia anónima. Ocultaba los ejemplares en el compartimiento de equipaje de un autobús. La especie está protegida por la legislación mexicana debido a su vulnerabilidad ante la pérdida de hábitat y la captura indiscriminada.
| Tráfico de tortugas en Chiapas: delito grave con sanciones penales
El Ministerio Público Federal inició la carpeta de investigación correspondiente. El detenido permanecerá en el Centro Estatal de Reinserción Social (CERESO) número 14, en Cintalapa, mientras se desarrolla la investigación complementaria, cuyo plazo se fijó en tres meses.
En México, la legislación tipifica el tráfico de tortugas en Chiapas y otras especies silvestres como delito grave. El Artículo 420 del Código Penal Federal establece penas de uno a nueve años de prisión y multas de hasta 3 mil días, que se agravan si las actividades afectan áreas naturales protegidas o tienen fines comerciales.
| Tráfico de tortugas en Chiapas: impacto ambiental y urgencia de vigilancia
El tráfico de tortugas en Chiapas representa una de las principales amenazas para la fauna silvestre en el sureste mexicano. Las especies más comunes en el comercio ilegal son las hicoteas, mojinas y tortugas de río, extraídas de sus hábitats para venta como mascotas o para consumo humano.
En mercados locales y puntos carreteros del estado, es frecuente el decomiso de ejemplares transportados en condiciones de hacinamiento, lo que provoca la muerte de muchos animales antes de llegar a su destino.
Las autoridades anunciaron nuevos operativos en la región y reiteraron la importancia de fortalecer la vigilancia y la educación ambiental para frenar esta práctica que afecta gravemente a las especies silvestres del sureste.







