El secretario de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados, Éctor Jaime Ramírez Barba, señaló que la promesa de abasto de medicamentos del gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum involucionó de la Megafarmacia a las Farmacias del Bienestar, a las que calificó como “puestitos en la banqueta”.
El legislador del Partido Acción Nacional (PAN) expuso que jurídicamente, dichas farmacias no cumplen con los requisitos mínimos de la Ley General de Salud.
Modelo improvisado
Calificó el nuevo modelo como improvisado, que pone en riesgo la salud pública y evidencia el fracaso en la estrategia de abasto de medicamentos.
«La Farmacia del Bienestar que hoy presumen en Palacio Nacional es, para efectos prácticos y legales, un módulo callejero de entrega de cajas; ni farmacia, ni botica, ni droguería. Es un stand promocional, ideal para la foto, pero carente de sustento regulatorio», sentenció.
En la práctica, agregó, se trata de sacar los medicamentos de los almacenes de las instituciones de salud para exponerlos en la calle.
Irregularidades y contradicciones
En su opinión, las irregularidades y contradicciones con la ley vigente son, entre otras:
- Violación a la Ley General de Salud: El Artículo 257 de la LGS establece categorías claras para los establecimientos dedicados al proceso de medicamentos: Farmacia, Botica y Droguería, todas definidas como establecimientos formales con infraestructura y control sanitario.
- Ausencia de requisitos sanitarios: Las verdaderas farmacias están obligadas a cumplir con la farmacopea y Normas Oficiales, así como contar con un responsable sanitario titulado (especialmente si manejan medicamentos controlados, Art. 260).
- Abasto insuficiente: La supuesta gran estrategia nacional se reduce a un anaquel con apenas 22 claves de medicamentos, lo que el gobierno afirma que cubre el 80% de lo requerido por adultos mayores.
- Incremento del riesgo de desabasto: La nueva estrategia contempla inutilizar los almacenes de las instituciones de salud que tradicionalmente han operado con estrictos controles sanitarios; se trata de sacar a la calle los medicamentos que ya se distribuyen en las instituciones.
- Centralización de Birmex: Las ‘Farmacias del Bienestar’ serán abastecidas por Birmex, institución que ha fracasado sistemáticamente en las compras consolidadas de medicamentos.
Exigen cumplimiento normativo
“Llamar farmacia a un módulo en la banqueta no lo convierte en farmacia, como tampoco llamar ‘hospital’ a una carpa lo vuelve hospital. Todo lo que hoy se presume en conferencias tendrá que pasar, tarde o temprano, por el filtro de la Ley, las NOMs y los verificadores sanitarios”, advirtió.
Por último, exigió garantizar un verdadero sistema de abasto con establecimientos que cumplan la normativa, protegiendo así la salud y la seguridad de los mexicanos.
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