El gobierno federal presentó una actualización amplia sobre el desarrollo de la nueva red de trenes de pasajeros, cuyos primeros tramos ya registran avances en construcción, estudios especializados y procesos de compra de material rodante.
Tanto Andrés Lajous Loaeza, titular de la Agencia Reguladora del Transporte Ferroviario (ARTF), como el general Gustavo Ricardo Vallejo Suárez, comandante del Agrupamiento de Ingenieros “Felipe Ángeles”, expusieron el estado que guarda uno de los proyectos de infraestructura más extensos de la actual administración.
El mapa ferroviario: fases y recorridos de los trenes
Andrés Lajous explicó que la fase uno abarca los tramos Ciudad de México–Pachuca, Ciudad de México–Querétaro–Irapuato y Saltillo–Nuevo Laredo, con obras en ejecución y contratos ya asignados para estructuras principales.
Señaló que la fase dos, en etapa de estudios, comprende los corredores Irapuato–Guadalajara, Querétaro–San Luis Potosí–Saltillo y Mazatlán–Los Mochis, donde se levantan análisis de demanda, impacto social y estudios urbanos y económicos, además de ingeniería básica.
El proyecto, apuntó, busca aprovechar derechos de vía existentes, modernizar estaciones históricas y ofrecer servicios regionales adicionales a los viajes de largo itinerario.
Sedena acelera frentes de obra en el centro y norte
Vallejo Suárez detalló que la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) construye directamente los tramos México–Pachuca y México–Querétaro, al tiempo que desarrolla ingeniería básica para segmentos futuros como Querétaro–Irapuato, Saltillo–Nuevo Laredo, Irapuato–Guadalajara, Querétaro–San Luis, San Luis–Saltillo y Mazatlán–Los Mochis.
Mencionó que en el tramo México–Pachuca, de vía doble electrificada, se edifican viaductos elevados, 53 obras de drenaje, puentes vehiculares, pasos ganaderos y estaciones en Tizayuca, Téllez y Pachuca, además de instalaciones de mantenimiento y complejos eléctricos.
En el México–Querétaro, expuso que la Sedena avanzó en terraplenes, cimentaciones y estructuras para 25 viaductos, 76 obras de drenaje y 10 puentes ferroviarios.
Este trayecto, de 226 kilómetros, opera en convivencia con una de las rutas de carga más activas del país. Se edificarán estaciones en Huehuetoca, San Juan del Río, El Marqués, Querétaro, además de Buena Vista y Tula.
Actualmente hay 14 frentes de obra activos y más de 11 mil empleos generados.
Ingeniería básica: tecnología, mediciones y trazos
Vallejo explicó que la primera etapa de ingeniería básica está prácticamente concluida y permite a las constructoras avanzar en proyectos ejecutivos.
La segunda etapa, de más de mil 400 kilómetros, incluye estudios topográficos, geotécnicos, hidrológicos y biológicos, junto con misiones aéreas con sensores láser que producen modelos tridimensionales de gran precisión para definir trazos preliminares y ubicar estaciones y paraderos.
Con estos insumos se mantienen reuniones de coordinación con autoridades estatales de Guanajuato, Jalisco, Querétaro, San Luis Potosí, Coahuila y Sinaloa, así como con comunidades y ejidos para la liberación de derechos de vía.
Nuevos trenes, identidad visual y contenido nacional
Lajous informó que ya se estableció la imagen de los trenes del tramo México–Pachuca, inspirada en el tren Insurgente y en colores de la bandera nacional. Los trenes tendrán capacidad para 700 pasajeros, accesibilidad universal y velocidad máxima de 130 km/h.
A escala nacional, continúa la licitación para la compra de 47 trenes eléctricos, con una exigencia de 65% de integración nacional. Tres empresas ya presentaron propuestas, que están en evaluación.
Coordinación y calendario
Tanto la ARTF como la Sedena subrayaron que el proyecto avanza con coordinación interinstitucional en materia ambiental, social, técnica y presupuestaria, e insistieron en que la ejecución se mantiene dentro de los tiempos previstos.
“Tenemos presupuesto, avance técnico y organización. Somos optimistas y confiamos en concluir en tiempo y forma”, expresó el general Vallejo.
Lajous añadió que la construcción y diseño de esta red es un esfuerzo conjunto de numerosas instituciones, con un objetivo común: volver a conectar al país mediante un sistema ferroviario moderno y público.
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