Luego de ocho jornadas de trabajo, el Gabinete de Búsqueda de Personas de la Ciudad de México concluyó la primera fase del Plan de Recuperaciones Controladas en las fosas comunes del Panteón Civil Dolores, con un total de 23 individuos.
Esta intervención, de carácter técnico, humanitario y forense, tiene como objetivo localizar, recuperar, analizar, identificar y restituir de manera digna los elementos óseos de personas fallecidas —identificadas o no— inhumadas en las fosas comunes del Panteón Civil de Dolores, el único en la capital que cuenta con este tipo de sepulturas.
Se recuperaron 23 individuos que se analizarán mediante la confronta de información genética, documental y de archivo con el propósito de generar hipótesis de identificación que permita, finalmente, la entrega digna a sus familias.
Las jornadas se llevaron a cabo del 18 al 27 de noviembre, periodo durante el cual especialistas en arqueología, antropología física y criminalística realizaron la excavación arqueológica forense de manera progresiva.
Lee: Conocerá el mundo el horror de desaparecidos cerca del estadio mundialista de Guadalajara
Revisión minuciosa
Iniciaron con el retiro de la lápida, la cuadriculación del área y el marcaje de los primeros niveles de la fosa 26. Posteriormente, excavaron de forma controlada en tramos de entre 20 y 40 centímetros hasta alcanzar el nivel nueve correspondiente a los 200 centímetros de profundidad, con una separación cuidadosa y una revisión minuciosa de toda la tierra de relleno.
Localizaron diversos elementos humanos que podrían provenir de hospitales, así como fragmentos, microfragmentos y astillas de elementos óseos. Los individuos recuperados fueron resguardados y trasladados al Instituto de Servicios Periciales y Ciencias Forenses del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México para su análisis e integración con las hipótesis de identidad.
Esta exhumación se realizó en apego a la Ley General en Materia de Desaparición Forzada de Personas, Desaparición Cometida por Particulares y del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas, así como de la Ley General de Salud en materia de control sanitario de la disposición de órganos, tejidos y cadáveres de seres humanos.
Equipos especializados
Los trabajos contaron con la participación de equipos especializados de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México, la Secretaría de Gobierno, la Comisión de Búsqueda de Personas y el Poder Judicial, a través del Instituto de Servicios Periciales y Ciencias Forenses (ISPCF), instituciones que forman parte del Gabinete de Búsqueda de Personas Desaparecidas de la Ciudad de México.
Esto en coordinación con la Comisión de Derechos Humanos, la Secretaría de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, el Heroico Cuerpo de Bomberos, la Policía Auxiliar de la alcaldía Miguel Hidalgo y personal del Panteón Civil de Dolores.
Colectivos, familiares de personas desaparecidas y personas expertas independientes también participaron como observadores, tuvieron acceso a la excavación y acompañaron el proceso de cadena de custodia hasta el ISPCF. Asimismo, recibieron informes diarios y acompañamiento psicosocial por parte de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas de la Ciudad de México.







