Ciudad de México, 10 may. (AMEXI).- “¿Festejar?, no, no se puede, porque tengo que trabajar para comer”, dijo doña Tere, una mamá de 65 años que desde hace más de 40 años es una trabajadora doméstica sin ningún tipo de prestación social.
Tere, no tuvo la fortuna de celebrar el Día de las Madres en restaurantes acompañada por sus hijos, porque tiene que cumplir con “su patrona” desde hace más de 10 años, pero se dijo feliz de ser madre.
Sin embargo, la mamá de cuatro hijos, quienes también por su trabajo no la podrán festejar este día, se siente feliz por el Día de las Madres y bendecida porque ayer pudo estar con su hija.
Lee: En México hay 38.5 millones de madres; 30% son jefas de hogar
En la otra cara de la moneda, la señora Isabel, una madre de tres hijos, celebró en un restaurante con su familia.
No le importó esperar más de una hora para tener una mesa en un restaurante de una conocida cadena, lo importante para ella era festejar esta fecha con sus seres queridos.
Isabel consideró que ser madre no significa sacrificios por los hijos, sino “una bendición de Dios y un gusto estar con ellos”.