Oscar Rodriguez. Corresponsal
Oaxaca. Oax., 24 jul (ANEXI).- El gobierno de Oaxaca calificó como un boicot, el ataque por parte de un grupo insurrecto que quemó viviendas y un cerro en la zona de la mixteca como un acto de provocación para romper las mesas de diálogo y el acuerdo de paz que hay entre los municipios de San Miguel El Grande y Llano de Guadalupe.
El titular de la Secretaria de Gobierno Jesús Romero López, dijo que se reunió con los dos grupo de autoridades municipales y ambos se deslindan de la violencia generada, por lo que adelantó que ya se investiga por parte de la Fiscalía de Justicia al grupo que trató de generar la inestabilidad con un ataque premeditado.
Afirmó que si no fueron las autoridades agrarias, comunales y municipales de la zona, los que generaron el caos en la zona, fueron los grupos del crimen organizado que se dedican a la tala del bosque.
«A quienes no les conviene que haya paz, que el pueblo se vuelva a organizar para cuidar y preservar sus bosques, pues a quienes están sacando tajada de este conflicto y que ha devastado con tal ilegal, clandestina e inmoderada la zona en disputa entre ambas localidades».
El titular de la política interna de Oaxaca Jesús Romero, reveló que ya se reunieron con la activista y cineasta Ángeles Cruz, y se llegaron a varios acuerdos importantes, entre ellos el reforzamiento de los dispositivos de seguridad, mayor número de elementos de la policía, el ejército y la Guardia Nacional en la base de operaciones mixtas.
Segundo, avanzar en la indagatoria de la Fiscalía de Justicia, para lograr la captura de todos los responsables de las masacres cometidas en la zona, detener a los implicados en el ataque a los policías estatales y responsables del asesinato del hermano de la activista Ángeles Cruz, ultimado en una emboscada en la zona.
Y por el otro lado, desarticular a los grupos que está generado la violencia en la zona con el único objetivo de dividir a los pueblos y generar el encono y obtener con la Secretaria del Media Ambiente las reglamentaciones para declarar zona de reserva natural el bosque que hay en disputa en los pueblos.