Sebastián Moreno y Humberto Huerta Mireles
Ciudad de México, 14 ago. (AMEXI).-Andrés Manuel López Obrador, jefe del Ejecutivo Federal mexicano, acusa que la campaña de “narcopresidente” en su contra volvió a retomarse después de la captura de Ismael “El Mayo” Zambada García y de Joaquín Guzmán López “El Güero Moreno”, el pasado 25 de julio.
Durante la mañanera de hoy, López Obrador opina que a sus adversarios les molesta el impulso de las reformas constitucionales que envió hace tiempo al Congreso de la Unión, en especial los cambios planteados para el Poder Judicial de la Federación (PJF), por lo que intentan “ablandar al presidente” al orquestar una campaña donde lo llaman “narcopresidente”, insiste.
“Vino lo de Culiacán, lo del señor Zambada, y vuelve a las redes ‘AMLO presidente narco’, pero con todo regresa, ¿y el dinero? ¿De dónde se utiliza tanto dinero para esto?

“Y no es nada más el asunto del señor [Ismael “El Mayo”] Zambada, les debe de estar molestando algo más: las reformas, nuestras posturas en política exterior, entonces: ‘A ver, vamos a ablandar al presidente’, nada más que yo sigo al pie de la letra la recomendación del dirigente que consiguió la soberanía del Canal de Panamá, el general [Omar] Torrijos, decía: ‘El que se aflige se afloja’”, comenta desde Palacio Nacional.
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En la sección “Quién es quién en las mentiras”, Elizabeth García Vilchis señala que hasta 13 de agosto el hashtag #NarcoPresidenteAMLO tenía 138 mil menciones, además de 4.5 millones de vistas.
García Vilchis expone que suman 26 mil 600 cuentas que ya habían utilizado este tipo de etiquetas durante el periodo electoral.

Acercamientos con el narco y sospechas
Sin embargo, el presidente Andrés Manuel López Obrador ha dado pie a las sospechas en su contra y al hashtag “#Narcopresidente” y “#Narcogobierno” por sus acciones.
Millones de personas en el mundo y diversos medios de comunicación internacionales tienen todavía en mente el ya famoso encuentro del presidente de México con Consuelo Loera, mamá de Joaquín Archivaldo “El Chapo” Guzmán Loera, quien en actitud de “gran jefa” ni siquiera hace el intento de bajar de su camioneta, y es el presidente López Obrador el que tiene que acercarse a su vehículo para saludarla de mano el domingo 29 de marzo de 2020: “Te saludo, no te bajes; ya recibí tu carta… un adulto mayor merece todo mi respeto, independientemente de quien sea su hijo”, dijo en aquella ocasión López Obrador para intentar apaciguar los ataques por sus acciones, por lo que lo llaman “narcopresidente”.

Ese día dialogaron de manera breve sobre una carta que Consuelo Loera le envió al jefe del Ejecutivo Federal, solicitando que interviniera ante las autoridades de Estados Unidos para visitar a su hijo antes de morir.
Lo anterior levantó ámpula en todos los medios de información nacionales e internacionales y en la conferencia mañanera del lunes 30 de marzo de 2020, López Obrador tuvo que tratar de justificar su acción y explica que acudió a la localidad de La Tuna, Sinaloa, muy cerca de Badiguarato, para inaugurar una carretera que conectaba a Badiguarato con Guadalupe y Calvo.
Además, varios testimonios en poder de las autoridades estadounidenses y de acuerdo a la publicado en The New York Times, un capo del Cártel de Los Zetas pagó 4 millones de dólares a personas allegadas a López Obrador para ser liberado.
Otros testigos de esta narcoalianza indican que existen videos de los hijos del presidente recibiendo dinero del crimen organizado y de una reunión entre un colaborador de López Obrador e Ismael “El Mayo” Zambada.
Muchas versiones más de testigos ligados a las autoridades estadounidenses revelan presuntos sobornos que allegados al presidente de México se encargan de recibir.

Extraña liberación de “El Ratón”
Otro hecho que causó escozor y por lo que es llamado “narcopresidente” fue el sonado “Culiacanazo, cuando el 17 de octubre de 2019 los militares quedaron en entredicho, pues tras capturar a Ovidio Guzmán López, “El Ratón”, hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán, lo dejan en libertad horas después por supuestas amenazas a las familias de los soldados y otra versión señala que para no arriesgar a la población de Sinaloa a una narcoguerra, según trató de justificar el presidente López Obrador, quien giró la instrucción de dejar suelto al narcojunior.
La periodista Anabel Hernández considera que estos hechos no son obra de la casualidad, ya que Consuelo Loera nunca está sola, siempre es rodeada por infinidad de sicarios que le sirven de escolta: “Es evidente que eso era una reunión concertada”, afirma la comunicadora.
Los nexos de AMLO con la delincuencia
Por si lo anterior fuera pecata minuta, varios medios de comunicación internacionales apuntan a los nexos de López Obrador y sus allegados con la delincuencia organizada, es decir, con los cárteles de las drogas, como LatinUS, The New York Times, Insigth Crime y Deutsche Well.
La misma senadora Xóchitl Gálvez Ruiz, excandidata opositora a la Presidencia de México, acusó en reiteradas ocasiones la existencia de un “narco-Estado”, al “narcopresidente” y señaló en campaña a la “narcocandidata”, por lo cual las autoridades electorales la sancionaron.