Jalisco es el último invitado. Charros llegó a la última serie de la temporada, contra Dorados, obligado a ganar al menos un juego para asegurar su lugar en los playoffs de la Liga Mexicana de Beisbol y lo hizo de manera categórica, al imponerse 10-3 a Chihuahua en el primer duelo.
Con este resultado, la novena albiazul se medirá a los Sultanes de Monterrey, líderes de la Zona Norte (54-36), en una serie a ganar cuatro de un máximo de siete juegos, misma que comenzará el sábado 9 en Monterrey y continuará en el Estadio Panamericano, a partir del martes 12.
Apenas en su segunda campaña de regreso a la LMB, Jalisco reclamó su lugar en la postemporada tras un cierre meteórico en el que rescataron cinco de sus últimos siete compromisos, para un saldo positivo de 46-44 a falta de un par de juegos para que finalice el rol regular.
La victoria llegó de la mano del jalisciense Luis Iván Rodríguez, quien tuvo una noche excelsa y aseguró su tercer triunfo de la campaña tras lanzar seis innings de cuatro hits y par de carreras, sin regalar pasaportes y recetando cuatro ponches, para estacionar su PCLA en un envidiable 2.79.
Kyle Garlick despertó de su letargo con el bat al conectar un grand slam que coronó el rally de cinco carreras apenas en la primera entrada.
A la ofensiva también destacó el receptor Carlos Mendívil, quien se fue de 3-3, también con cuadrangular incluido, tres producidas y par de anotadas.
Dejan en el terreno a Diablos
En otro juego, en León, con dos carreras en la parte baja de la novena entrada, la segunda de caballito, los Bravos de León (40-49) dejaron en el terreno a los Diablos Rojos del México (62-25) al abrir la serie en el Estadio Domingo Santana.
La escuadra local perdía 5-4 al llegar a la última tanda del encuentro, pero encontró la manera de atacar al taponero japonés, Tomohiro Anraku, a quien le ligaron dos sencillos y un doblete para empatar el juego.
Luego de pasaporte intencional para Danny Ortiz con el que se llenó la casa (buscando hacer una jugada de doble play), vino Philip Evans a la caja de bateo quien dejó pasar los cuatro pitcheos que vio del asiático para negociar el pasaporte y de esta manera conseguir la carrera de la victoria para ellos.
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En labor de relevo, Tomohiro Anraku se llevó el descalabro.
Después de este encuentro, Diablos y Bravos tienen pactado el segundo juego de la serie este miércoles a partir de las 19:30 horas en el Estadio Domingo Santana.
El pitcher abridor probable para los Rojos es Justin Courtney mientras que Aaron Shortridge lanzará por los Bravos.
