Edwin “Canito” Cano todavía no es campeón del mundo, pero ya se visualizó e incluso su mentalidad va más allá: quiere barrer la división del peso mínimo.
El Edwin “Canito” Cano retará al puertorriqueño Óscar “Pupilo” Collazo, campeón de las 105 libras de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y de la Organización Mundial de Boxeo (OMB).
“Yo aspiro a ser el número uno de la división, no ser solo campeón de un organismo, quiero barrer toda la división”, dijo Edwin Cano.
Su oportunidad titular llegará este sábado en Cancún, México, en una velada de Cancún Boxing y Golden Boy Promotions, y el objetivo es claro: unirse a la selecta lista de campeones mundiales mexicanos.
Y Edwin “Canito” Cano se preparó de la mejor forma consciente de que la oportunidad llegó y no la quiere desaprovechar, pues con nueve años como profesional está seguro que es el momento.
“Ya llevo alrededor de 11 años tocando las puertas y trabajando para que llegue esta oportunidad y ahora que la tengo no la quiero dejar pasar”, afirmó Edwin «Canito» Cano.
Rival de peligro y de respeto
Edwin «Canito» Cano llega con marca de 13-2-1, cuatro por nocaut, y enfrentará a un campeón invicto con 11-0 y que ha ganado ocho antes del límite. Pero quiere vencer a los mejores.
“Es un peleador invicto, fuerte, se dice que es el mejor de la división y nada como ganarle al mejor”, afirmó Edwin «Canito» Canito.
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Y aunque cree que lo llevan como “carne de cañón” o un rival fácil para el monarca puertorriqueño, quiere demostrar que eso no es verdad.
“Me gusta eso que como dicen, me llevan de carne de cañón, voy solo con mi papá en la esquina contra todo el mundo, yo siempre lo he dicho, arriba del ring somos dos nada más”, concluyó Edwin «Canito» Cano.
