Ciudad de México, 10 sep (AMEXI).- Todas las tardes, cuando va a practicar José de Jesús Castillo, lo hace con su entrenadorcito: “Mi Prícipe”, como llama a su adorado hijo.
A él dedicó de inmediato la medalla de bronce que ganó el domingo anterior en la Arena La Chapelle, en parapowerlifting de los Juegos Paralímpicos París 2024.
Eufórico y muy expresivo fue en la ceremonia de premiación, donde lució la foto de su retoño, en clara alusión de quién es su máxima motivación.
Ayer por la noche llegó al aeropuerto capitalino y tanto él como los demás integrantes de la delegación mexicana fueron recibidos como estrellas, en medio de porras, aplausos, banderas tricolores y cartulinas con mensajes.
Mi entrenadorcito
“Chuy”, como cariñosamente lo llaman, fue uno de los más queridos por las personas que fueron a recibimiento y se dejó querer, tomar fotos, dio mensajes de motivación a algunas personas y dio una y otra entrevista.
Claro, que uno de los temas fue su príncipe, su hijo, de quien dijo “es mi entrenadorcito, es mi ´couchito´, porque él todos los días está conmigo en las tardes entrenándome”.

Compartió que “me ayuda, poque emocionalmente me está entrenando, porque me impulsa a ello. Esta medalla es para él, esta semana es su cumpleaños y le adelanté su regalito”.
Al llegar a casa ya se las arreglaría para ver cómo festejar su cumpleaños, ya a su lado.
El mejor regalo es la salud
Luego reflexiono en que el más grande, el primero que nada, es el de tener salud y, el segundo, un regalito de este tipo, dijo al tiempo que agarró orgulloso su medalla.
José de Jesús Castillo fue uno de los 17 medallistas más expresivos con su medalla y el más eufórico, tal vez, y para ello tiene razones suficientes, como los demás.
“Todos lo disfrutamos a nuestra manera, sabemos lo que pasamos para ganar una medalla, es toda una carrera, son cuatro años para plasmarlos en 7 segundos y ahí sacamos la frustración, la emoción y el nerviosismo, entonces, tratas de hacerlo gritando, siendo efusivo y hay mil maneras de hacerlo”, compartió.
Además, se dejó llevar por el entorno en la Arena La Chapelle, al comentar que pareció que estaba en México.
¡Vamos Chuy!
“No sé de dónde salió mucho mexicano. Había muchas banderas mexicanas por todos lados y los gritos de ¡vamos Chuy, vamos Chuy!, se escuchaban por todos lados y ahora que llegué al aeropuerto parece que estoy allá, donde se me acercó mucha gente de México”, expresó.
Además, de ser su retoño, por qué José de Jesús Castillo le dedicó la medalla de bronce ganada en los Juegos Paralímpicos París 2024 a su pequeño hijo? pic.twitter.com/O0f7xbKTob
— JOSÉ LUIS SIMÓN RODRÍGUEZ (@JOSLUISSIMNROD1) September 10, 2024
Se pregunta de dónde salieron tantos mexicanos, pero de verdad se los agradece mucho porque siente que le ayudaron al momento de levantar la balla con los 222 kilogramos que le valieron para ganar la medalla de bronce.
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Además, tuvo que esperar 8 años para volver a subir al podio, después de hacerlo en Río 2016, porque en Tokio 2020 se presentó con molestias de una lesión y eso le impidió ganar una presea.
“Pero siempre llega la revancha y en esta ocasión llegó y subirse al podio de unos Juegos Olímpicos y Paralípicos, que es el máximo evento que un atleta de alto rendimiento busca, no es nada fácil y por eso la efusividad de mi festejo”, concluyó.