El Hijo del Santo tuvo su última lucha como profesional y un emotivo adiós, rodeado de sus amigos y con la mano el alto.
Heredero de una de las máximas glorias de la lucha libre mexicana, el Hijo del Santo tuvo una brillante y exitosa carrera que terminó luego de 43 años.
Fue en el Palacio de los Deportes de la Ciudad de México donde el Enmascarado de Plata finalizó su andar en los cuadriláteros y con un triunfo.
La noche era de alto riesgo para el Hijo del Santo, pues antes de que él subiera al ring estaba en riesgo de perder su máscara.
Santo Jr apostó la cabellera contra Ángel Blanco Jr, pero si el de la tercera generación de los plateados perdía, Hijo del Santo sería el que perdería la máscara.
Y esa lucha fue muy complicada para el joven enmascarado, quien fue víctima de la rudeza extrema de Ángel Blanco Jr.
Aunque la experiencia estuvo del lado de Ángel Blanco Jr, el apoyo fue para Santo Jr, quien con la máscara bañada en sangre y rota, reaccionó.
Fue con la icónica llave que llevó a los grandes triunfos a su abuelo y su padre, la “de a caballo”, con la que logró el triunfo más importante de su corta carrera.
Así ganó la cabellera de Ángel Blanco Jr y de paso permitió que su padre terminara su carrera defendiendo su máscara.
Hijo del Santo termina su legendaria carrera con un triunfo
Entonces llegó uno de los momentos más esperados de la noche, la última lucha del Hijo del Santo.
La afición se le entregó en todo momento al Hijo del Santo, quien acompañado de LA Park y Último Dragón vencieron a Doctor Wagner Jr, Texano Jr y el Hijo de Fishman.
La lucha fue de dominio alterno, aunque todas las miradas estaban puestas en el enmascarado de plata.
El grito de “¡Santo, Santo!” retumbó una y otra vez, mostrando apoyo y cariño hacia uno de los mejores luchadores mexicanos de los últimos años.
Los topes que hicieron de su padre y de él una leyenda, además de las “tijeras” y otros castigos aparecieron.
Pero fue la icónica llave “de a caballo” con la que Hijo del Santo rindió al Hijo de Fishman, para así finalizar su legendaria carrera con un triunfo.
“Gracias por estar en esta última lucha, gracias a todos ustedes, a todos estos papás que me fueron a ver cuando eran niños, y a esos jóvenes que me vieron y ahora como abuelos traen a sus nietos, me da mucha emoción”, dijo el Hijo del Santo.
Y seguro de que la leyenda continuará, encargó a su hijo con toda la afición, así como lo hizo su padre con él.
“Felicidades Santo Jr. Y así como mi papá me dejó en manos de ustedes, hoy les dejo a este joven que ojalá salga adelante”.
Así, en medio de una noche emotiva, terminó la carrera de uno de los luchadores históricos de México, pero la leyenda continua.






