Armand Duplantis, el pertiguista sueco de 25 años, saltó 6.28 metros en la reunión de Estocolmo e hizo historia al batir su propio récord del mundo.
El ganador de dos oros olímpicos, cinco veces campeón mundial y con cuatro títulos europeos, superó en su casa el último registro que había logrado el pasado mes de febrero cuando dejó el listón en 6.27 metros.
Durante la séptima parada de la Liga de Diamante, Duplantis rompió el récord mundial por duodécima ocasión en su carrera.
Desde que en febrero de 2020 arrebató la marca de 6.17 metros al francés Renaud Lavillenie, no para de imponer marcas y ahora ante su público.
El atleta no para de superarse y lo hace con una frecuencia temporal, sin un objetivo previo y sin obsesionarse.
“No sé dónde está mi límite, y no quiero saberlo, prefiero descubrirlo. Creo que se trata de empujarme día a día para ser mejor, superarme y llegar al límite que tenga que ser, sin tener un objetivo previo o algo que me haga obsesionarme. Voy fluyendo, y creo que de momento está yendo bastante bien con esa mentalidad”, explicó.
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Armand Duplantis escribe su nombre en la historia, otra vez
La ovación fue inmediata, se repitió la hazaña de inicio de año en Francia y mantiene firme su objetivo de romper la barrera de los 6.30 metros. Tiene hasta el día de hoy 100 saltos encima de los 6 metros.
Su último triunfo lo consiguió en la Bauhaus Galan, en la ciudad en la que siempre veraneaba y en un escenario que acogió los Juegos Olímpicos de 1912, allí donde están inscritos los nombres y fechas de 82 récords mundiales del atletismo, y a los que ahora añadirá el suyo.
El salto de “Mondo” revitalizó un recinto cargado de historia. El “Stadion” no presenciaba un récord mundial desde 1997, cuando el danés Wilson Kipketer paró en 1.41.73 minutos el cronómetro en los 800 metros.
«Para mí es el estadio más bonito que existe, aquí están los nombres de todos los que han batido un récord», presumió Duplantis ante la prensa.
«Este era uno de mis grandes sueños, batir un récord en este estadio, está al mismo nivel que los Juegos Olímpicos. Era algo que quería de verdad. Es mágico», añadió.
Kurtis Marschall, de Australia, y Menno Vloon, de Países Bajos, completaron el podio, aunque fueron meros testigos.
Atrás, casi lejanos, quedan los registros de los anteriores plusmarquistas: el francés Renaud Lavillenie (6-16m) y el ucranio Serguei Bubka (6.15m), un saltador que firmó 35 récords, otro desafío para el rey sueco de las alturas, que en menos de dos semanas saltará en Ostrava.