Un torneo para el olvido, Santos terminó de la peor manera posible: en casa, con derrota y por goleada.
En un duelo en el que solo se jugaba la dignidad deportiva, Santos Laguna fue exhibido en casa por Xolos de Tijuana, que le propinó un 4-0 en el cierre del torneo. Los Guerreros terminaron su participación en el Clausura 2025 con una decepción más para su afición, la cual busca culpables por el pésimo desempeño del equipo.
Poco hay que salvar de este equipo verdiblanco tanto en la cancha como fuera de ella, pues no hubo más que una figura en el terreno de juego, Bruno Barticciotto, y ni Fernando “Tano” Ortiz ni Alejandro “Aleco” Irarragorri estuvieron a la altura del reto que representó el equipo de la Laguna.
Ni en casa se hicieron grandes
El partido empezó de buena forma para los locales, pero los que vacunaron primero fueron los Xolos en un tiro de esquina que Frank Boya remató solo en el área al minuto 16 y venció a Carlos Acevedo para abrir el marcador. Para sorpresa de muchos, los Laguneros intentaron responder y desplegaron un futbol interesante.
Pero los Xolos, otra vez a pelota parada, anotaron el segundo con un testarazo fantástico de Kevin Castañeda, al 30′, para el 2-0 que mostró lo que sería este partido, un desastre más para Santos y otro desencanto para la afición.
La gente ansiaba el pitazo final
La segunda parte arrancó con anotación de Raúl “Pantera” Zúñiga que remató completamente solo al minuto 53, con el defensor más cercano a varios metros del delantero, para poner otra espina en la corona de los Santos. El resto del partido fue un trámite para ambos equipos que únicamente esperaban el final para celebrar o lamentarse, dependiendo del banquillo.
Los asistentes también mostraron su frustración con el equipo de sus amores con una asistencia muy baja y caras de desgaste y hartazgo.
Y al minuto 89, como si fuera una metáfora de la temporada del Santos y en específico este último partido, Zúñiga consiguió su doblete con otro remate solo en el área que terminó por desahuciar a los que no habían abandonado aún el estadio.
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Una pretemporada con muchas incógnitas para Santos
Con “Aleco” Irarragorri a la cabeza, las cosas no cambiaron mucho en la Comarca. Su contratación del “Tano” Ortiz fue un fracaso, los refuerzos que consiguieron no hicieron diferencia y se ve poco que pueda hacer para corregir el rumbo de esta institución que hace mucho tiempo la perdió.
Ya sea buscar un nuevo director técnico, rehacer el equipo, jalar de las fuerzas básicas o esperar un milagro, la posición del hijo del dueño, en términos exclusivamente futbolísticos, empieza a tambalearse, pues en seis meses puso al equipo en la última posición de la tabla y no se ve un plan de acción para corregir dicha situación.