Desde el origen del olimpismo, las mujeres emprendieron la lucha por tener y ganar espacios entre los hombres y este lunes lograron su consagración con la llegada de Kirsty Coventry en la presidencia del Comité Olímpico Internacional (COI).
Desde Helene de Pourtales, Charlotte Cooper, primera medalla de oro en damas, Alice Milliat, quien hasta organizó los propios juegos mundiales femeninos para ganar espacios en Juegos Olímpicos, y demás histórica, hicieron el camino hasta la llegada de Kirsty Coventry.
En la sede del COI, en Lausana, Suiza, se dio el cambio de poder, donde el alemán Thomas Bach, electo desde 2013, entregó la estafeta a una exdeportista de África, de Zambabue.
“Trabajar juntos durante los próximos años y encontrar constantemente maneras de fortalecer y mantener unido nuestro movimiento”, exhortó Kirsty Coventry en su discurso.
Les dijo a los presidentes de los Comité Olímpicos Nacionales y a titulares de las Federaciones Deportivas Internacionales que son el mejor equipo para apoyarse en su camino del movimiento olímpico.
Movimiento Olímpico unido
Kirsty Coventry expresó su agradecimiento a Thomas Bach por su apasionado trabajo y por mantener unido al Movimiento Olímpico, principalmente, en los momentos más turbulentos.
Como parte de esa unión y guía, citó la realización de los Juegos Olímpicos París 2024 como lo más bellos de la historia.
En cuanto a su trabajo, expresó que “espero que se sientan orgullosos en el futuro”, donde su principal objetivo es mantener la unión de la familia olímpica.
Kirsty Coventry agradeció a Thomas Bach, a la familia olímpica, a su esposo, sus hijos y amigos, a las mujeres en su vida, como su abuela, su madre, su entrenadora y amigas por ayudarla en todo y a mantener los pies en piso firme.

También a sus padres que elaboraron pasteles y hamburguesas y vendieron miles de hamburguesas para recaudar dinero y ella pudiera entrenar y poder viajar a las competencias y poder crecer hasta convertirse en campeona olímpica en natación.
La llave de la casa olímpica
A su vez, Thomas Bach expresó en su discurso que “hoy es un día de gratitud, de confianza y alegría» y enfatizó que “nos hemos reformado, renovado y nos hemos unido en torno a los valores que definen nuestro Movimiento Olímpico”.
Thomas Bach también expresó que “en nuestra última Sesión en Grecia, ustedes, mis compañeros miembros del COI, eligieron a esta nueva líder. Han depositado su confianza en alguien cuya historia está profundamente arraigada en el Movimiento Olímpico. Como atleta olímpica, sabe lo que significa vivir los valores olímpicos. Sabe cómo liderar con valentía. La impulsa el deseo de contribuir a nuestro Movimiento Olímpico, que ha forjado su vida. Ahora ella hace historia: la señora Kirsty Coventry”.
El momento cumbre fue cuando Thomas Bach entregó la llave a Kirsty Coventry la llave de la casa del Movimiento Olímpico del mundo.