Ciudad de México, 9 jun. (AMEXI).- “Ya tengo mi anillo”. Así comenzó y así finalizó su participación la ex boxeadora mexicana Ana María “Guerrera” Torres al ser exaltada al Salón de la Fama del Boxeo Internacional.
La “Guerrera” Torres, parte de la generación 2024 en el recinto de los inmortales que se encuentra en Canastota, Nueva York, agradeció con emotivas palabras, satisfecha por lo hecho en su carrera profesional.
“Ya tengo mi anillo, estoy emocionada. Para mí es un honor estar aquí, hemos luchado mucho para que nos tomen en cuenta, que se nos abrieran las puertas en el boxeo femenil, yo sé que no ha sido fácil”, inició su discurso.
La “Guerrera” Torres fue campeona supermosca del CMB y realizó 10 defensas. Fue una de las pioneras del pugilismo en su país y ahora la segunda en Canastota, después de Laura Serrano.
“Quiero agradecerle porque todas hemos luchado para que esto sea una realidad, agradecer también al Salón de la Fama por tomar en cuenta al boxeo femenil. Me siento satisfecha del trabajo que hice”, añadió.
La pugilista recordó lo fundamental que fue su familia en el apoyo que le brindaron, sobre todo porque hubo carencias.
Los sueños se cumplen
“Gracias a mi esposo Cristóbal, a mis hijos. También a mis hermanos y a mi mamá que nunca me dejaron, siempre apoyándome, en las buenas y en las malas, porque sufrimos muchas carencias, pero al final pudimos lograr nuestro sueño”, dijo.
También agradeció a los organismos, particularmente al CMB, a Mauricio Sulaimán y a Don José Sulaimán, y se mostró orgullosa portando su cinturón verde y oro.
“Se vale soñar y si trabajas con disciplina y dedicación los sueños se cumplen. Hemos hecho bien el trabajo, compañeras. Gracias a Dios por darme la fuerza para no rendirme. Ya tengo mi anillo”, concluyó.
Ana María Torres fue inducida al Salón de la Fama junto a Ricky Hatton, Michael Moorer, Iván Calderón, un homenaje póstumo a Diego “Chico” Corrales, además de Jane Couch, ella junto a la “Guerrera” en la rama femenil.
