Por Luis Diego Rodríguez
Ciudad de México, 12 abr. (AMEXI).- Orenthal James, nació en San Francisco, California, y fue un corredor espectacular que salió de la Universidad del Sur de California y a partir de ahí fue figura en los Buffalo Bills en la década de los 70, para terminar su carrera con los 49ers de San Francisco.
Como figura pública dividió opiniones en Estados Unidos y en el mundo del emparrillado. Su historia abarca desde el éxito deportivo hasta la controversia legal.
Fue de las estrellas de toda una época, salía en las revistas y periódicos por su velocidad en abierta carrera por los emparrillados.
Inició su carrera como un talento deslumbrante en la Universidad del Sur de California, ganó el prestigioso Trofeo Heisman en 1968, lo cual lo catapultó como la gran promesa del draft de ese año, su destino era Buffalo y su objetico ser leyenda.
Su nivel siempre fue llamativo, era un fuera de serie en aquella época
En la NFL, brilló con los Buffalo Bills, convirtiéndose en el primer jugador en superar las 2,000 yardas terrestres en una temporada, siendo leyenda de la franquicia y posteriormente pasó a ser parte de San Francisco, donde culminó su carrera.
Acumuló logros que todo deportista sueña: Jugador Más Valioso de la NFL en 1973, cinco selecciones al Pro Bowl, líder anotador de la NFL en 1975 y miembro del Salón de la Fama del Futbol Americano desde 1985
Su capacidad para esquivar defensores y romper tacleadas lo convirtió en una pesadilla para las defensas rivales.
Figura electrizante
Exhibió un ritmo electrizante para aquella época e incluso se le considera uno de los corredores más influyentes en la historia del futbol americano e inspiró a generaciones de jugadores en todo el mundo.
Tras su retiro fue parte de shows de TV y películas, pero en 1994, su vida dio un giro dramático al ser acusado del asesinato de su exesposa, Nicole Brown Simpson, y su amigo Ron Goldman.
El juicio fue uno de los más mediáticos de la historia, siendo transmitido en vivo por televisión y generó un intenso debate social y racial.
A pesar de las pruebas y de los antecedentes de violencia doméstica, Simpson fue absuelto en un veredicto sorpresivo. Aunque en un juicio civil posterior se le encontró responsable y se le ordenó pagar una indemnización, pero Simpson nunca cumplió prisión por los asesinatos.
Robo a mano armada
En 2007, O.J. Simpson otra vez regresó a ser mediático, tras ser olvidado, pues fue arrestado por robo a mano armada y secuestro en un hotel de Las Vegas, Nevada, lugar donde vivió hasta el día de su muerte.
Fue condenado a 33 años de prisión, pero en 2017 fue liberado por buen comportamiento tras cumplir nueve años.
O.J. Simpson falleció el 10 de abril de 2024. Su familia comunicó la noticia a través de las redes sociales, indicando que había sucumbido a una batalla contra el cáncer.







