Oleksandr Usyk se arrodilló al terminar la pelea y elevó la mirada. Se sabía ganador y los jueces confirmaron su triunfo por decisión unánime sobre Tyson Fury.
El ucraniano ganó la revancha con puntuaciones idénticas 116-112 y defendió los títulos de peso completo del CMB, AMB y OMB en la Kingdom Arena de Riad.
Incrédulo con las tarjetas de los jueces, Tyson Fury (34-2-1, 24 KOs) cargó con la derrota y sufrió su segunda caída seguida ante el ucraniano, quien se mantiene invicto con 23-0, 14 por nocaut.
El primer round fue de estudio, ambos lanzando el jab y manteniendo a distancia al enemigo. Fury fue más insistente con los golpes de poder, pero Usyk respondió.
Fury mantenía a distancia al campeón con el jab, pero Usyk movía la cintura y no era un blanco fijo, y aprovechaba para soltar fuertes impactos a las zonas blandas.
El Gypsy King cerró mejor el segundo round con una derecha al rostro de Usyk, quien parecía más agresivo al inicio del tercero.
Oleksandr Usyk se quejó de un golpe de conejo mientras Fury iba al ataque. Fury por momentos se cambió a la guardia zurda y conectó al ucraniano, que mantenía la presión y el golpeo al cuerpo.
Fury, mucho más pesado -marcó 55 libras más en el pesaje– mantenía su mano derecha pegada al rostro, previniendo algún impacto del campeón.
Usyk, 15 centímetros menor, parecía más ágil en el ring, soltaba más golpes y algunos rectos de izquierda iban dirigidos a la barbilla del británico.
Fury soltó en el quinto asalto un upper con mucho peligro que conectó a Usyk, que seguía adelante, con mayor volumen de golpes.
Pero el inglés estaba siendo preciso. Conectó una derecha al cuerpo del ucraniano, quien lo resintió.
Tyson Fury estaba haciendo daño al cuerpo del ucraniano, quien sufría más desgaste por su constante caminar en el ring y por lanzar más golpes que su rival.
Usyk y su peligrosa izquierda
Pero la izquierda de Oleksandr Usyk seguía siendo muy peligrosa y conectó una directamente al rostro de Tyson Fury al final del sexto, pero el británico aguantó.
Con el 1-2 Fury seguía conectando al campeón, quien se movía por el ring y esperaba el momento oportuno para soltar su izquierda y volvió a conectar en el rostro del retador.
Al inicio del octavo episodio Tyson intentó con un upper, pero Usyk respondió con un gancho de izquierda.
Usyk llevó contra las cuerdas a su rival y lo castigó, pero Fury se amarró para evitar más daño. La pelea seguía muy igualada y estaban por llegar los rounds de campeonato.
El último tercio de la pelea inició nivelado. Las izquierdas de Usyk no dejaban de llegar al rostro del Gypsy King, que también esquivó muchos de esos golpes.
Y a la ofensiva Fury también conectó. Utilizó el upper, el jab y los ganchos al cuerpo, y también los amarres cuando se veía en peligro.
Con menos de un minuto en el episodio número 11, Usyk conectó otra izquierda al rostro de Fury, lo que hizo que la afición en la Kingdom Arena se emocionara.
En la esquina de Fury sabían que la pelea estaba muy cerrada y el británico salió al ataque, pero el campeón respondió con poder. Fury lo persiguió, intentó con uppers y ganchos.
Usyk se movía, soltaba la izquierda al rostro del ex campeón y lo conectó en repetidas ocasiones en el último asalto.
No hubo caídas, tampoco mucho drama y sí mucha entrega y una pelea muy igualada, por lo que tocaba a los jueces determinar quién era el vencedor, y ese fue Usyk, campeón unificado y uno de los mejores libra por libra.
Lee: Usyk vs Fury, la lucrativa pelea que repartirá casi 200 mdd