En el arranque de las semifinales del torneo más importante de Europa, el PSG sacó un triunfo importantísimo de visita ante el Arsenal por 1-0. En un encuentro entretenido y con mucha intensidad, el marcador no fue del todo justo pues el cuadro inglés mereció más.
Esto no es por decir que los parisinos no hicieron un buen partido, pues tuvieron un buen funcionamiento y al final pudieron incrementar la ventaja, pero también es cierto que, de no ser por la magnífica actuación de Gianluigi Donnarumma, el marcador hubiera sido muy diferente.
Los Gunners se irán muy desilusionados y frustrados, pues tuvieron chances muy claras para poder ir con ventaja a Francia que no pudieron aprovechar. Y ahora necesitarán de una noche mágica en la ciudad de las luces para llegar al escenario más grande del viejo continente.
Invasión francesa en Londres con el PSG
El partido arrancó con un estallido, pues al minuto 4, Ousmane Dembélé empezó una jugada en medio campo y él mismo la terminó con un disparo tan colocado que pegó en el poste y entró para darle la temprana ventaja a los de azul.
Durante la primera media hora, los dirigidos por Luis Enrique fueron superiores a sus rivales, algo que han mostrado una y otra vez en esta edición de la Champions. Pero hacia el final del primer tiempo, los británicos les fueron quitando el control del partido y generaron grandes ocasiones que el arquero italiano mantuvo fuera de su arco.
Avec vous, toujours ! ❤️🔥💙
Merci pour votre présence à Londres.
Rendez-vous à Strasbourg samedi et au Parc mercredi prochain !NOUS SOMMES PARIS ! #ARSPSG I #UCL pic.twitter.com/QCs4pDNtSK
— Paris Saint-Germain (@PSG_inside) April 29, 2025
Más balón de uno, más chances del otro
La segunda mitad siguió la tónica del final de la primera, con un Arsenal volcado al frente en busca del empate. Y al minuto de juego lo hubieran conseguido de no ser por un fuera de juego milimétrico de Mikel Merino. También hubo un par de disparos que Donnarumma sacó con las uñas de los dedos, ahogando el grito de gol de los aficionados ingleses.
Pero conforme avanzaba el reloj y la presión aumentaba, la posesión de los Gunners resultaba en menos profundidad en zona de ataque, por lo que la desesperación empezó a jugar en contra de los londinenses. El PSG aprovechó a la perfección esta situación, pues cerró filas y atacó al contragolpe, y en dos ocasiones estuvieron a nada de encontrar el segundo y liquidar la serie, pero sus disparos se fueron apenas desviados.
Una semana más para tener finalistas
La serie se definirá la próxima semana en el Parque de los Príncipes, en un partido donde ambos equipos saldrán a morir por un lugar en la gran final de Múnich. El PSG se agiganta en casa, pero el Arsenal mantiene la ilusión de quedarse la corona después de tirársela al Real Madrid.