Toluca casi anuló el juego ofensivo de América y con el 0-0 en el encuentro de ida, tiene todo a favor para definir la coronación el domingo en su cancha del Estadio Nemesio Díez.
El portero Luis García hizo en el minuto 41 la gran desviada en la mayor jugada ofensiva de América, en disparo cruzado y por abajo de Álvaro Fidalgo, en lo mejor del encuentro de ida de la final del Torneo Clausura 2025 de la Liga MX, que se disputó en el Estadio de la Ciudad de los Deportes.
A las 19:00 horas del próximo domingo, Toluca va recibir al América, en el encuentro de vuelta de la final, donde al ser local y con el apoyo de su gran afición y la posibilidad de contar con su goleador Paulinho, tiene grandes posibilidades de la coronación.
Inició el partido sin Paulinho
Ante la ausencia por lesión del goleador Paulo Dias “Paulinho”, con lo cual perdió poder ofensivo, el técnico Antonio Mohamed estableció una línea defensiva de cinco, con Bruno Mendez, Luan Garcia y Andres Pereira como centrales y Diego Barbosa por derecha y Jesús Gallardo por izquierda como carrileros.
Pero nada de defensivo fue Diablos Rojos de Toluca, porque con base a una gran presión en la marca y sin dejar que los de América elaboraran sus jugadas, trasladaron más veces el balón a terreno de los de casa.
Después del minuto 10, Águilas de América empezó a tener un poco más el balón, pero los de Toluca continuaron con su presión y en el minuto 19 ganaron el balón que llegó a Alexis Vega, quien sobre la carrera dio el pase a la derecha a su acompañante Robert Morales, quien disparo por abajo y rechazó el arquero Luis Ángel Malagón.
El colombiano Cristian Borja levantó a los aficionados de sus asientos porque le llegó el balón por izquierda y casi sobre línea de saque mandó disparo por abajo, el esférico superó al portero en su salida y la de gajos prácticamente fue sacada por Luan Garcia, al minuto 26.
Un minuto después, Erick Sánchez recibió el balón, en el área y de frente a la portería, pero fue desarmado por Luan Garcia con válido recargón con el hombro, mientras que Marcel Ruiz hizo remate con la cabeza, a centro a balón parado desde izquierda, pero la de gajos se fue apenas por encima del larguero, al 29.
América también se defendió bien
América, que fue la mejor defensiva durante la campaña regular, también se echó en su campo cuando Toluca tuvo el balón y al minuto 36 realizó Robert Morales un disparo por abajo y cruzado sin tanta potencia y Malagón se quedó con la redonda.
En el minuto 41, llegó el balón a izquierda, donde Álvaro Fidalgo bajó el esférico, avanzó unos metros al centro y realizó disparo potente, cruzado y raso y en el fondo Luis García se tendió a su izquierda e hizo la soberbia desviada y salvada y así respondió a indicativos que era un punto débil en el funcionamiento de Diablos Rojos de Toluca.
Y la banda americanista se puso a cantar con los vocalistas de Banda MS en el medio tiempo, al entrar a la cancha a cantar “Mi mayor anhelo”, convertido en himno de los aficionados azulcremas.
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El partido se reanudó con el segundo tiempo sin que América explotara su localía, mientras que Diablos Rojos de Toluca se mostró complacido con un buen trabajo de prácticamente absoluto control sobre el ataque de los azulcremas.
Pues sí, el encuentro bajó intensidad y luego de unos minutos del ingreso de Rodrigo Aguirre, como que el juego agarró movilidad, un poco de frescura.
Final con dramatismo
Otra gran acción de América, al minuto 81, mediante un trazo a Rodrigo Aguirre, quien bajó el balón y luego disparó con su pie malo, el derecho, y el balón salió totalmente desviado.
El cierre del encuentro fue dramático, porque en el minuto 90+2 hizo llega por izquierda Isaías Violante, quien mandó centro raso y Robert Morales hizo remate de tacón que le salió suave y directo a las manos de Malagón.
Dos minutos después, Alejandro Zendejas envió desde izquierda un centro preciso, donde Israel Reyes metió la cabeza y sólo rozó la de gajos y le quitó la oportunidad a Rodrigo Aguirre de dar cabezazo frontal y el uruguayo se molestó, dio manotazos al pasto y reclamó a su coequipero, y luego de eso escucharon el silbatazo final del encuentro.
