México tuvo la oportunidad de cerrar el año con un campeón mundial más, pero fue tal la entrega de Willibaldo García y René Calixto que terminaron en empate y el título sigue vacante.
Los mexicanos se enfrentaron en Shizuoka, Japón, por el campeonato supermosca de la Federación Internacional de Boxeo (FIB) que estaba vacante.
Uno de los jueces dio su tarjeta 118-110 para Willibaldo García, otro 116-112 para René Calixto y el tercero vio la pelea 114-114 para el empate que les impidió coronarse.
Fue Willibaldo García, nacido en Copala, Guerrero, el que parecía decidido a todo y salió más agresivo, buscando conectar con potentes bombazos de izquierda.
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El quinto round, agresivo
Hasta el quinto round, la pelea agresiva y de presión que estaba haciendo Willibaldo parecía dar resultado.
Su estilo incómodo, su mayor volumen de golpes e impedir que René “Indio” Calixto estuviera tranquilo y pensara estaba jugando a favor de Willibaldo.
Pero al final del sexto round René Calixto conectó una mano derecha potente al rostro de Willibaldo y lo puso en malas condiciones, pero lo salvó la campana.
A partir de ese momento el “Indio” Calixto parecía tomar el control de la pelea, moviéndose alrededor del ring, conectando y caminando.
Aunque Willibaldo García no dejó de presionar, ya no era tan certero como en los primeros rounds, fallaba más y le entraban más golpes.
Cuando fue necesario los dos se metieron al intercambio de golpes, protagonizando una guerra como las que están acostumbrados los mexicanos a brindar.
La batalla se niveló en los últimos asaltos, los dos en busca de la victoria y del nocaut que no llegó.
Todo quedó en manos de los jueces y no hubo ganador, fue un empate que impide a México sumar otro campeón mundial y que deja vacante el título de la FIB, en espera de que los mexicanos tengan una pelea de desempate y la oportunidad de coronarse.