La economía mexicana enfrenta un escenario de estancamiento prolongado y, aunque no se encuentra en recesión, el crecimiento se ha aplanado, advirtió Grupo Financiero BASE, por lo cual recortó su expectativa de expansión para 2026 a apenas 0.8%, desde el 1.0% previo.
Gabriela Siller, directora de Análisis Económico de Grupo Financiero BASE, explicó que lo preocupante es que el estancamiento ya no responde a factores coyunturales, sino a un cambio estructural que comenzó en el sexenio anterior y se ha profundizado en la actual administración, particularmente tras la reforma al Poder Judicial.
“El PIB potencial, lo que México puede producir, se ha reducido. La inversión fija bruta ha caído y eso limita el crecimiento de largo plazo”, señaló en rueda de prensa sobre expectativas económicas para el año próximo.
Crecimiento mínimo y riesgos de estanflación
Para 2025, dijo Siller, BASE estima un crecimiento de apenas 0.33%, mientras que hacia 2027 los avances económicos difícilmente superarán el 1.4%, incluso en escenarios sin presiones inflacionarias.
El único factor que podría dar un ligero impulso en 2026 sería el «efecto optimismo» derivado del Mundial de futbol.
La reducción del PIB potencial también complica la tarea del Banco de México (Banxico) para llevar la inflación nuevamente al objetivo de 3%.
“Esto aumenta la probabilidad de una estanflación y de un estancamiento económico prolongado”, alertó la directora de Análisis Económico de Grupo Financiero BASE.
Mercado laboral deteriorado
Comentó que el ajuste en las expectativas de crecimiento de la economía mexicana responde, además, al deterioro del mercado laboral y a la alta probabilidad de que el PIB registre una contracción en el cuarto trimestre de este año.
“Con los indicadores actuales, no vemos cómo la economía pueda alcanzar un crecimiento de 1.0% en 2025”, puntualizó la especialista.






