El asesinato del presidente municipal de Uruapan, Michoacán, Carlos Manzo Rodríguez, ocurrido el pasado 1 de noviembre, ha generado una ola de reacciones de rechazo y solidaridad por parte de líderes empresariales, sindicales y gubernamentales, quienes coincidieron en la necesidad urgente de fortalecer la seguridad en el país.
Durante el Encuentro de Sindicatos y Empleadores del Estado de México en donde se firmó el Convenio para la conformación del Consejo Económico, Social y Ambiental (CONSEA), distintas voces se unieron para condenar el crimen y exigir justicia, destacando que la violencia no puede convertirse en parte de la normalidad nacional.
Rechazo absoluto a la violencia: Coparmex
Juan José Sierra Álvarez, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), expresó su solidaridad con la familia del alcalde y con el estado de Michoacán, subrayando que «sin seguridad no es posible el desarrollo económico ni social que tanto necesita nuestro país».
Sindicato de Telefonistas hace llamado a la justicia
Por su parte, Francisco Hernández Juárez, secretario general del Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM), pidió un minuto de silencio en honor a Carlos Manzo y advirtió sobre el riesgo de normalizar este tipo de hechos.
«Este tipo de eventos no deben quedar impunes ni aceptarse como parte de la vida mexicana», afirmó.
CROM condena “vil asesinato”
Rodolfo González Guzmán, secretario general de la Confederación Regional Obrera Mexicana (CROM), calificó el asesinato como «vil» y aseguró que no es así como se acallan las voces.
«Tenemos que seguir trabajando todas y todos, porque este país es más grande que cualquier circunstancia que lo quiera doblegar», señaló.
Seguridad como pilar del desarrollo: Horacio Duarte
En tanto, Horacio Duarte Olivares, secretario general de Gobierno del Estado de México, coincidió en que la seguridad es fundamental para la paz y el desarrollo. «Rechazamos cualquier tipo de violencia venga de donde venga», dijo, destacando los esfuerzos diarios de la entidad desde la mesa de paz en su entidad.
			






