Con una mirada profunda y sensible hacia uno de los temas más urgentes de nuestro tiempo, la actriz Jaklyn Bejarano presentará en el Festival Internacional de Cine de Morelia (FICM) “La Gloria”, una película que retrata la dura realidad de la migración y la resiliencia humana a través de los ojos de “Irene”, una mujer salvadoreña que huye de la violencia en busca de una vida mejor.
El filme, escrito y dirigido por Joseph Walter, se ha proyectado con éxito en festivales de Estados Unidos, incluido el Austin Film Festival, y tendrá su primera proyección en México dentro del marco del FICM, que se llevará a cabo del 10 al 19 de octubre.
En entrevista para AMEXI, Bejarano comparte el proceso emocional y actoral detrás de un papel que la llevó a conectar con historias reales de dolor, esperanza y dignidad.
Orgullosa de regresar a su tierra michoacana con un proyecto tan potente, la actriz también reflexionó sobre el poder del cine para generar empatía y visibilizar las luchas humanas que a menudo permanecen en silencio.
“‘La Gloria’ es una película que nos invita a mirar al otro con empatía”, afirmó al tiempo de destacar la importancia de visibilizar una problemática que atraviesa a toda Latinoamérica.
Lee: Cecilia Galliano se refugia en el trabajo, tras la muerte de su madre (VIDEO)
Una historia que trasciende fronteras
El director Joseph Walter se inspiró en las experiencias de su infancia en la frontera de Texas, donde sus abuelos solían ofrecer agua y comida a los migrantes que cruzaban.
Desde esa mirada empática nace “La Gloria”, un retrato humano sobre los lazos invisibles que nos unen y la necesidad de comprender al otro.
“Más allá del tema migrante, la película habla de cómo nos conectamos como seres humanos, de cómo generamos empatía y entendimiento”, explicó.
“Irene”: una interpretación desde la verdad
Bejarano interpreta a “Irene”, un papel profundamente emocional, pues es una mujer embarazada que atraviesa la frontera impulsada por la desesperación y la esperanza.
“Irene está al límite; huye de una violencia que la persigue y que ha marcado a miles de mujeres en América Latina. Es un viaje de supervivencia, pero también de redescubrimiento de la vida y del valor de su hija.”, dijo.
Para construir su personaje, Jacklyn realizó un proceso de investigación riguroso. Contó con la guía del coach actoral Medín Villatoro, quien la acompañó desde el casting, y dedicó tiempo a estudiar el acento salvadoreño, ver documentales y leer obras sobre la experiencia migrante.
“Llené el proceso de referencias: poesía de Rosario Castellanos, música de Mercedes Sosa… piezas cargadas de historia y emoción que me ayudaron a conectar con Irene”, compartió la actriz.
Además, reveló que una de las escenas más difíciles fue aquella donde “Irene” revela las violencias que vivió en El Salvador.
“Fue muy doloroso revivir esas heridas, no solo desde la ficción, sino desde la realidad de miles de mujeres que viven esto cada día. Sentí una gran responsabilidad de visibilizar esas historias”, confesó.
Ver esta publicación en Instagram
Un regreso con orgullo a su tierra
Originaria de Michoacán, Bejarano vive con emoción el estreno de “La Gloria” en el festival cinematográfico que marcó sus sueños de infancia.
“Desde niña iba al Festival de Cine de Morelia y me visualizaba ahí. Ahora, regresar con una película tan potente y socialmente importante es una satisfacción enorme”, afirmó.
En ese sentido, recordó que incluso insistió para que la producción eligiera el festival de Morelia sobre el de Guadalajara.
“Quería que fuera aquí, porque es regresarle algo a mi tierra. Además, soy la única mexicana en la producción estadounidense, y eso me llena de orgullo.”, destacó.
La empatía como motor de cambio
Más allá del cine, Jaklyn Bejarano busca que “La Gloria” despierte conciencia sobre la migración y las múltiples luchas sociales que enfrentan las comunidades latinoamericanas.
“El mensaje que me gustaría dejar es que volvamos a mirar al otro con empatía, que recuperemos esa humanidad que a veces dejamos arrumbada por las prisas o la indiferencia. En el set, esa conexión con David Morse, mi compañero de escena, fue lo que permitió que todo fluyera desde la verdad.”, comentó.
Para la intérprete, actuar es una forma de compromiso social, pues “cada personaje te exige ir más profundo, ser más consciente. El arte tiene el poder de transformar, y ‘La Gloria’ es un ejemplo de eso.”
Es así que, la cinta es más que una historia sobre migración: es un espejo de la dignidad, la pérdida y la esperanza. El público podrá verla durante las proyecciones del Festival Internacional de Cine de Morelia, antes de su recorrido comercial por salas y plataformas.