Ciudad de México, 17 Ago (AMEXI).- Después de disfrutar de su amor y tras terminar la temporada de la obra “Independiente”, Alma Cero y el productor Enrique Orozco, por fin han escalado a un nuevo nivel en su relación.
La pareja este fin de semana por fin dio el “Sí”, al contraer nupcias por lo civil, en una reunión intima a la que llegaron buenos amigos de la pareja, para desearles lo mejor.
La ceremonia tuvo lugar el emblemático Palacio Metropolitano, ubicado en el corazón de la ciudad. Ahí se dieron cita decenas de curioso que al ver llegar a personalidades como Daniela Luján, Cynthia Klitbo, Lorena de la Garza, Lisardo, Guillermo Murray, no dudaron en acercase para tomarse la selfie o simplemente felicitarlos.
Alma Cero se casó con Enrique Orozco
Aunque uno de los más esperados fue Ariel Miramontes, quien por años ha conquistado corazones con el entrañable personaje de “Albertano”, mismo que junto a Rosa Aurora, interpretado por Alma Cero, han logrado trascender con la serie de “María de Todos los Ángeles”.
Hay que recordar que esta serie fue la que lanzó al estrellato a la misma Alma Cero, como Ariel Miramontes, además de que la pareja de actores han vuelto a hacer mancuerna, ahora en la serie “El príncipe del Barrio”.
“Que sea un matrimonio duradero, que se la pasen, felices. Ella esta muy contenta, ya se lo merecía”, comentó Miramontes a su llegada al lugar, aunque estaba muy feliz por este enlace, él dejó claro, que no se quiere casar.
Así que, fue tajante al decir que él disfruta de su soltería y prefirió cambiar el tema, para comentar que la boda seria temática, por ello los asistentes acudieron vestidos en color negro.
Hay mucho entusiasmo entorno a este enlace matrimonial por lo civil, debido a que los novios son muy queridos.
Hasta el momento la pareja no han salido ha hablar dar algunas palabras, pues se sabe que llegaron desde temprano para cuidar de los detalles, además de la novia sería arreglada en el mismo recinto.
Alma y Enrique, el pasado 14 de febrero se unieron también en lo espiritual, a través de un ritual y ahora lo hacen la ley.
