El proyecto de “Spamalot” que inició el actor Arath de la Torre con muchos nervios lo concluye con la gran satisfacción que le dio la respuesta del público a su trabajo en el escenario.
Al concluir la temporada del musical, el artista reveló que vivió un cierre muy emotivo de esta puesta en escena, tras el desafío que implicó preparar su personaje con solo tres semanas.
“Fue muy emotivo, porque es una obra que vi desde que nació, la buscaron en Londres y luego se asociaron con Gou. Fue un torito de varios meses, pero hicimos lo mejor que pudimos y la gente quedó muy contenta y satisfecha”, indicó en un encuentro con los medios de comunicación.
Señaló que “El rey Arturo” fue un personaje que no le costó trabajo soltar, pues como actor está acostumbrado a dejarlos en un baúl, “para tal vez después volverlo a abrir; siempre los dejo colgados en el camerino con la esperanza de volverlos a hacer”.
Dijo que lo que sí extrañará es dejar el proyecto por el vínculo que llegó a formar con sus compañeros de trabajo.
“Los Mascabrothers son mis hermanos arriba y abajo del escenarios, trabajar con ellos siempre fue un placer, con María Elena (Saldaña), con Adal, con (Ricardo) Fastlicht, con (Ricardo) Margaleff. La verdad fue un gran viaje con un principio, un desarrollo y un final; y este final fue muy emotivo”, comentó.
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Por otro lado, señaló que se siente agradecido por los proyectos de teatro que ha tenido en este año, luego de su salida de la segunda temporada de “La casa de los famosos México”.
En ese sentido, indicó que combinar su trabajo en televisión con el teatro, en el que tuvo casi tres obras al mismo tiempo, es algo que disfruta, pues considera que “es el gimnasio de un actor”.
“Estamos diseñados para eso, para entretener al público. La verdad es que me encana estar en el escenario, es una cosa extraordinaria porque estuve en ‘La señora presidenta’, luego con los ‘Marihuanólogos’ y ‘Spamalot’. Estoy en el gimnasio del actor, que es el teatro, estoy entrenando la voz, el cuerpo y eso me fortalece mucho. Este año fue de mucho teatro, desde que salí de La casa de los famosos me refugié en el teatro, que es lo que me apasiona”, afirmó.
Por otro lado, refirió que le gustaría trascender como “un curador de almas” a través de su trabajo en el que “regala sonrisas a la gente”.
“Mi perspectiva de la carrera cambió y ahora siento que mi misión espiritual es curar almas, porque la gente entra de una forma al teatro y salen de otra. He superado muchísimas cosas, ahora soy un hombre más fuerte que quiere regalarle al público eso, que salgan curados”, finalizó.
