Con una puesta en escena vibrante y una energía inigualable, 31 Minutos llevó al Tiny Desk Concerts su estilo característico que mezcla humor, sátira y música, todo mientras mantienen su esencia infantil y lúdica.
Aunque originalmente, la banda chilena se le conoce por su programa de televisión que combina marionetas con música y noticias ficticias, la agrupación logró trascender en la escena musical con un sonido que puede disfrutarse tanto por niños como por adultos.
En su presentación, la banda chilena ejecutó un set que incluyó algunos de sus grandes éxitos, como “Mi Equilibrio Espiritual”, “Bailan sin Cesar”, “Objeción Denegada”, “Calurosa Navidad”, “Mi Muñeca me Habló”, “Arwrarwrirwrarwro”, y “Yo Nunca Vi Televisión” (“Y Luego Sí Pero Después No”).
Con marionetas en el escenario, un diseño minimalista y su característica mezcla de humor y crítica social, 31 Minutos no solo mostró su destreza musical, sino también el impacto que su música tiene en diferentes generaciones.
Durante esta presentación, también hubo muchas alusiones al tema de las campañas antiinmigración que imperan en Estados Unidos.
“Soy Tulio Triviño y esta es la primera vez en Washington de 31 Minutos, que es exactamente el tiempo en que expiran nuestras visas de trabajo”, bromeó.
“Así que me apuro en presentar a los latinos, urbanos, emergentes, hip, hop, hermanos brothers, que Bailan sin César”, agregó.
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El concierto: un viaje de nostalgia, humor y música
Los miembros de 31 Minutos tomaron el pequeño escenario de Tiny Desk de la National Public Radio (NPR), el servicio de radiodifusión pública de Estados Unidos, con una puesta en escena que, al igual que su programa de televisión, desbordó creatividad y originalidad.
Con sus marionetas en mano, el set se convirtió en el lugar perfecto para hacer un viaje por los éxitos más recordados del grupo, pero también en una oportunidad para mostrar todo su talento.
Liderada por Juan Carlos Bodoque (voz y guitarra) y Pollo Castillo (bajo), la formación interpretó “La canción del ratón”, uno de sus mayores éxitos. La melodía pegajosa, el ritmo rápido y la letra irreverente, que hace referencia a las travesuras de un ratón en un mundo lleno de absurdos.
“Alza la mano si se te venció la (visa) Waiver / Alza la mano si tu eres ilegal”, cantó el títere Juan Pablo Sopa con motivo del show en ‘Tiny Desk’, que este mes dedica el ciclo “El Tiny” para conmemorar el Mes de la Herencia Hispana en Estados Unidos.
Al cierre, cuando el cocodrilo de jockey volvió a aparecer, Tulio cerró: “Eso ha sido 31 Minutos. “Fue un placer, un honor, y…¡ya nos vamos al avión!”.
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Un espectáculo que toca corazones y rompe barreras
A lo largo de todo el concierto, 31 Minutos dejó claro que no son solo una banda de música para niños, sino una propuesta musical que ha logrado trascender generaciones.
La diversidad de sus seguidores, que incluye tanto a niños que crecieron con su programa como a adultos que descubrieron su música más tarde, quedó claramente reflejada en el recibimiento cálido y entusiasta del público.
La participación de 31 Minutos en Tiny Desk no solo fue un hito para la banda, sino un testimonio de cómo la música y la creatividad pueden unir a diferentes generaciones en un mismo espacio. Los fanáticos de todo el mundo pudieron disfrutar de una propuesta única que no solo es música, sino también cultura, humor y reflexión.
Desde su debut en 2003, 31 Minutos se convirtió en un referente de la cultura chilena, logrando un éxito tanto en su país como en otras partes de Latinoamérica.
Su participación en Tiny Desk es una prueba más de su evolución como banda y de cómo su música permanece vigente y entre el gusto del público.
La banda no solo conquistó el escenario de NPR Music, sino que reafirmó su lugar como una de las propuestas más originales y queridas de la música en español, manteniendo siempre la magia que los hizo famosos: la capacidad de hacer pensar, reír y disfrutar a cualquier público.
“No hicimos nada diferente a lo que somos: humor, música y desorden con propósito”, declaró Tulio Triviño al cierre del concierto, entre aplausos y risas.