La cantante Alejandra Guzmán se recupera con éxito de una cirugía que emergencia que la obligó a cancelar todas sus presentaciones previstas para lo que resta de 2025.
«Por recomendaciones médicas y para priorizar mi salud, me he visto en la necesidad de reprogramar los conciertos agendados para 2025 al año 2026, debido a una intervención quirúrgica que me realicé tras el show de Monterrey», informó en un comunicado.
En ese momento, la “Reina de Corazones” no dio más detalles de la intervención quirúrgica a la que se sometió, pero prometió a todos sus fans que regresará con más fuerza a los escenarios.
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Alejandra Guzmán recibe diagnóstico de enfermedad incurable
A unas cuantas semanas de su cirugía, la artista conversó brevemente para un matutino y dio algunos detalles sobre su estado de salud.
«Bien, (estoy) recuperándome. Me sacaron líquido sinovial», dijo La Guzmán, a quien se aprecia su mano y la muñeca con una férula.
Pero lo que más llamó la atención es que dio a conocer que padece una enfermedad que no tiene cura y con la que deberá lidiar por el resto de su vida.
La artista agradeció la preocupación y reveló que en esta crisis de salud también recibió un diagnóstico de hipertensión: “soy hipertensa”.
¿Qué es la hipertensión?
La hipertensión arterial es una enfermedad crónica en la que aumenta la presión con la que el corazón bombea sangre a las arterias, para que circule por todo el cuerpo.
De acuerdo con el Seguro Social, el sobrepeso y la obesidad pueden aumentar la presión arterial, subir los niveles de glucosa en la sangre.
Además de colesterol, triglicéridos y ácido úrico, lo que dificulta que la sangre fluya por el organismo.
En el mundo, se estima que existen más de mil millones de personas con esta condición, mientras que en México, se habla de 30 millones.
La mayoría de las personas que padecen hipertensión arterial no lo saben, porque no tienen ningún síntoma.
Sin embargo, se pueden presentar malestares como dolor de cabeza intenso, mareo, zumbido de oídos, sensación de ver lucecitas, visión borrosa, dolor en el pecho y/o lumbar y tobillos hinchados.
El IMSS indicó que la hipertensión arterial es una enfermedad crónica que no se cura, pero que es posible controlar.