La comedia mexicana se encuentra de luto, tras darse a conocer la muerte de Eduardo Manzano, “El Polivoz”, a los 87 años dejando un legado que marcó la historia del entretenimiento en México.
Con su humor ingenioso, personajes inolvidables y un estilo único que acompañó a generaciones enteras, Manzano se convirtió en un símbolo de identidad cultural y en un maestro del arte de provocar sonrisas.
La triste noticia la dio a conocer su hijo, el actor Lalo Manzano, a través de sus redes sociales, sin que, hasta el momento, diera a conocer mayores detalles de las causas de su muerte.
«Hoy el escenario de la vida ha bajado el telón. Mi padre, un comediante querido por miles y un ser humano admirado por todos los que lo conocieron,ha partido de este mundo. Fue un hombre extraordinario, bondadoso, inteligente y con un corazón tan grande como su talento», dijo.
Además, recordó a su padre no sólo como un gran artista, sino como un hombre bondadoso, trabajador, con un gran corazón, capaz de transformar la tristeza en risas incluso en los momentos más difíciles.
«Detrás de cada chiste había un trabajador incansable, detrás de cada aplauso había un ser humano que amaba profundamente lo que hacía, y detrás de cada sonrisa siempre hubo un padre que nos enseñó a reír incluso en los momentos más difíciles», recordó.
Para muchos actores, colegas y fans su partida marca el fin de una era, sin embargo sus personajes, sus sketches, sus actuaciones seguirán vivos cada vez que alguien recuerde su voz, sus gestos, su humor.
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Una vida dedicada al humor
Nacido el 18 de julio de 1938 en la Ciudad de México, Eduardo Manzano conformó junto a Enrique Cuenca el emblemático dúo cómico “Los Polivoces”, un programa que durante las décadas de 1960 y 1970 revolucionó la comedia televisiva en México y Latinoamérica.
Entre sus personajes más emblemáticos destacan “Gordolfo Gelatino”, “Wash and Wear”, “Agallón Mafafas”, los cuales se ganaron un lugar en el corazón del público, gracias a su talento para la imitación, el humor satírico y una chispa cómica que traspasaba la pantalla.
Con el paso de los años, Manzano continuó activo en cine, televisión y teatro, elaborando una trayectoria de más de cinco décadas.
En años recientes, muchos lo reconocían también por su papel como “Don Arnoldo López” en la serie “Una familia de Diez”, un personaje que consolidó su vigencia ante nuevas generaciones.







