Corresponsales
Acapulco. Gro., 15 jun (AMEXI).- Ante el enojo y malestar de los habitantes de 110 colonias de este Puerto turístico, quienes desde hace 15 días no tienen agua, la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado de Acapulco (CAPAMA), responsabilizó a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), del desabasto del vital líquido.
En un comunicado este organismo informó a la población que, debido a variaciones de voltaje y apagones por parte de la CFE, se ha quedado sin servicio de energía eléctrica la planta potabilizadora de “El Cayaco”, por lo que se ha suspendido el bombeo del sistema de captación Papagayo II.
Por tal motivo, el abastecimiento de agua potable se restablecerá una vez que se regularice el suministro de luz, en el 55 por ciento de las colonias porteñas afectadas, pues estas variaciones en el voltaje han ocasionó desperfectos en 16 equipos de bombeo.
Vecinos de las colonias perjudicadas, comentaron a esta agencia de información que, desde que la CFE restableció el cableado y postes de luz, después del paso del huracán Otis, comenzaron las variaciones de voltaje e incluso, varios transformadores han “estallado” y algunos postes se han venido abajo por el poco grosor que tienen.
“No decimos que hayan hecho mal su trabajo por las prisas y presiones del Gobierno federal para restablecer el servicio eléctrico, pero antes no sufríamos de esos problemas”, comentaron los colonos, quienes también expresaron su preocupación porque sus aparatos electrodomésticos se dañen por esas variaciones.
Cuestionados si no han acudido a CAPAMA para que les expliquen cundo podrían arreglar o cambiar sus bombas de agua, respondieron a AMEXI: “Hablamos con el ingeniero Alfredo Rivera, director operativo de CAPAMA y nos comentó que debido a las variaciones de voltaje por la mala conexión de los transformadores de CFE se quemaron las bombas abastecedoras de agua”.
“Además, nos advirtió que este problema iba a durar bastante, hasta que no lleguen a un acuerdo para que CFE les reponga esas bombas o determinar quién pagará los daños, ya que el municipio ahorita no tiene presupuesto para arreglarlas, pues son bombas industriales muy grandes que cuestan arriba de 300 mil pesos cada una y hasta un millón de pesos”.
“También nos dijo que, como la maestra Abelina López Rodríguez, se terminó el presupuesto por financiar su campaña para reelegirse como presidenta municipal de Acapulco, se quedaron sin dinero para soportar estos gastos”.
Mientras tanto, los acapulqueños están padeciendo la fata de agua potable, cuyo problema no tarda en explotarles tanto a las autoridades locales como federales.