Desaparece activista trans en Oaxaca; colectivos exigen su localización y temen crimen de odio
Colectivos reportaron la desaparición en Oaxaca de la activista trans María Mendoza Lucas, defensora del territorio y buscadora de personas desaparecidas. Al parecer desapareció en la zona limítrofe entre Oaxaca y Puebla, donde realizaba acciones de acompañamiento. Entre los colectivos existe el temor de que se trate de un crimen de odio, dada su trayectoria como mujer trans y defensora comunitaria.
Desaparición de activista trans en zona de riesgo en Oaxaca
María, de 31 años, había salido de Eloxochitlán de Flores Magón rumbo a Huautla de Jiménez. Su rastro se perdió al avanzar por la región fronteriza con Puebla. La última vez que se le vio, vestía blusa verde, pantalón negro de mezclilla, tenis negros y gorra roja.
La colectiva Acompañamiento Jurídico y Psicológico por la Dignidad Disidente (COJUDIDI) denunció la desaparición y exigió a la Fiscalía General de Justicia de Oaxaca una búsqueda inmediata y eficaz. A María se le reconoce por su participación en causas sociales, su labor como danzante tradicional, y su acompañamiento a defensores mazatecos perseguidos judicialmente.
Riesgos agravados por identidad y activismo
Además de ser defensora, María es una mujer trans, lo que triplica los riesgos de violencia en su contra. Por ello, diversos colectivos se han sumado a la exigencia de localización con vida, alertando sobre el patrón de violencia que enfrentan las personas de la diversidad sexual en contextos de defensa territorial.
Oaxaca es uno de los estados más peligrosos para personas defensoras. La desaparición forzada sigue siendo un mecanismo para inhibir la defensa de derechos. De acuerdo con organizaciones civiles, entre diciembre de 2018 y octubre de 2024 se registraron 252 atentados a la vida contra personas defensoras: 225 asesinatos y 27 desapariciones.
Del total, 20% se cometieron contra mujeres y personas de la diversidad sexual: 202 hombres, 39 mujeres y 11 personas de la diversidad. En Oaxaca, se documentan seis desapariciones de defensores, incluyendo cuatro personas mixtecas.
Estos datos exhiben la forma estructural de la violencia, el racismo y la discriminación que enfrentan las poblaciones vulnerables en el país. La desaparición de María Mendoza Lucas se suma a una lista dolorosa que exige respuesta institucional urgente y protección efectiva para quienes defienden la vida y el territorio.
 
			 
                    







