En Oaxaca, en un hecho que ha encendido las alertas en el Congreso del Estado, una fracción de diputadas de Morena denunció que el machismo político impide el avance de una reforma constitucional clave.
La iniciativa busca establecer una gubernatura de cinco años reservada para la primera mujer que gobierne la entidad, revirtiendo la actual legislación que impone un periodo corto de solo dos años tras el mandato del gobernador de Oaxaca, Salomón Jara en 2028.
La diputada de Morena, Concepción Rueda Gómez, presentó ante el Pleno la propuesta para modificar esta duración. Sin embargo, advirtió que el proyecto está frenado por acuerdos de poder entre hombres.
Freno por machismo político
Rueda Gómez denunció la existencia de un pacto carnal entre hombres en el poder político de Oaxaca, quienes se resisten a ceder espacios reales de decisión. Afirmó que el estado tiene la obligación de romper el techo de cristal y lograr un cambio profundo.
Así como la entidad avanzó en la alternancia para acabar con tiranías y cacicazgos, ahora debe saldar una deuda política y social teniendo una mujer gobernadora con tiempo suficiente para actuar, máxime con una mujer en la Presidencia de la República.
Bloqueo en comisiones
La legisladora lamentó que la iniciativa no avanza porque prevalece una visión patriarcal, una barrera que incluso permea en la Comisión de Equidad de Género, donde algunas legisladoras se han negado a que la propuesta pase al pleno para su votación.
Detalles de la propuesta
El plan técnico plantea reformar el artículo cuarto del Decreto 1624. El objetivo es mover la concurrencia de elecciones locales con las federales hasta el año 2033. De esta manera, el mandato de la próxima gobernadora iniciaría el 1 de diciembre de 2028 y concluiría el 30 de noviembre de 2033.
Inviabilidad de dos años
La diputada fue clara al señalar que los argumentos de ahorro y austeridad no pueden estar por encima de los derechos político-electorales.
«Todas y todos sabemos que en un periodo de dos años los márgenes de acción son mínimos y las transformaciones profundas resultan casi imposibles. Por eso, este análisis debe incluir la experiencia de quienes han gobernado desde los municipios y conocen de estas limitaciones», sentenció, haciendo un llamado a escuchar a colectivas feministas y a la academia.
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Cero tolerancia al acoso
En medio de este clima de exigencia, la Cámara de Diputados de Oaxaca afirmó que no tolerará la permanencia de legisladores violentadores.
La Presidenta de la Junta de Coordinación Política, Tania Caballero Navarro aseguró que el Poder Legislativo no será cómplice ni solapará acciones misóginas.
Esta postura surge tras las quejas contra dos diputados de Morena: Oliver López García y Zeferino García Jerónimo. Caballero afirmó que no habrá impunidad para aquellos que tienen denuncias por cometer agravios en contra de mujeres.
Señalamientos contra legisladores
Los casos son graves. El diputado Oliver López García es acusado de reclutar a mujeres jóvenes, de 19 a 26 años y de buena apariencia, para acceder a un puesto laboral en su cubículo donde tendrían asignaciones personales.
Por su parte, el diputado Zeferino García Jerónimo ha sido señalado por colectivos civiles de atacar y acosar sexualmente a mujeres migrantes.
Ruta jurídica y desafuero
La coordinación de Morena anunció que se integrará una comisión especial para buscar y respaldar a las víctimas, ofreciendo medidas cautelares si han sido amenazadas. Una vez que exista el proceso jurídico en la Fiscalía General de Justicia, se procederá al desafuero y expulsión de las filas del partido.
Además, los acusados deberán enfrentar el escrutinio público y, de ser necesario, la revocación de su cargo y la reparación del daño con disculpas públicas.
Postura de la Agenda Violeta
La diputada Cony Rueda, quien encabeza la Agenda Violeta, exigió el retiro inmediato de la diputación a los acosadores y ofreció apoyo legal. Condenó tajantemente la actitud de sus compañeros: «Condeno la actitud de los diputados, que no merecen estar en la política. Yo ni les hablo, porque no merecen ni ser llamados diputados».
Por último, la diputada presidenta de la Mesa Directiva, Eva Diego Cruz anunció que se trabaja en un código de ética interno en la cámara para sancionar estas conductas lesivas en el futuro.
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