La Fiscalía General de la República (FGR) mantiene abierta una investigación para identificar a los responsables del robo, almacenamiento y comercialización de hidrocarburos robados.
Dichos hidrocarburos los descubrieron el pasado mes de julio dentro de una bodega en el municipio de Huitzilac, Morelos, donde fueron asegurados cientos de miles de litros de gasolina y turbosina.

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¿Qué investiga la FGR en este caso?
El secretario de Seguridad Pública estatal, Miguel Ángel Urrutia Lozano, confirmó que la indagatoria se centra en ubicar a quiénes sustrajeron el combustible.
Así como a quiénes tenían a su cargo la operación del inmueble y a los compradores que lo adquirían para su distribución.
Aunque reconoció que existen avances importantes, aseguró que aún no pueden darse a conocer públicamente debido a la secrecía del proceso.
¿Qué relación hay con otros casos en el país?
La investigación en Morelos ocurre en paralelo a detenciones registradas en Tamaulipas, donde fueron asegurados varios implicados, entre ellos integrantes de la Marina y funcionarios, acusados de participar en redes de tráfico de hidrocarburos.
Para Urrutia, ambos casos reflejan que el robo de combustible sigue siendo un fenómeno nacional que no puede minimizarse ni pasar inadvertido.
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¿Dónde operaba la bodega descubierta en Morelos?
El titular de Seguridad Pública estatal precisó que el inmueble se encontraba en el kilómetro 48 de la autopista y carretera federal México-Cuernavaca, lo que le otorgaba un punto estratégico de acceso.
Esa ubicación, dijo, permite presumir que las operaciones eran conocidas o al menos perceptibles para distintas autoridades, lo que también es materia de investigación.
¿Quiénes compraban el combustible robado?
De acuerdo con las primeras líneas de investigación, algunos compradores provenían de la Ciudad de México, desde donde empresarios y distribuidores acudían para abastecerse y posteriormente comercializar los hidrocarburos.
Por esa razón, las indagatorias se han extendido para identificar a la red completa de complicidades que integraba la cadena de consumo, almacenamiento y venta.
¿Qué busca la FGR?
La Fiscalía General de la República busca fincar responsabilidades no solo en los operadores directos, sino también en quienes obtenían beneficios económicos de esta red ilícita.
Lo anterior, podría alcanzar a empresarios y distribuidores de gran escala en la capital del país.