Culiacán, Sin., 23 oct. (AMEXI).- Llegan 300 nuevos elementos del Ejército Mexicano, con lo cual suman ya 600 militares enviados para pacificar esta ciudad convulsionada por la violencia, tras la traición de los Chapitos al Mayo Zambada.
Los soldaos se dirigieron de inmediato a las instalaciones de la Novena Zona Militar, en donde recibieron instrucciones específicas sobre sus acciones a realizar, es decir, para reforzar la vigilancia y patrullajes, a fin de disminuir también la incidencia delictiva en la zona centro del estado.
Los efectivos de las fuerzas castrenses ingresaron a Culiacán, por la caseta de peaje de Costa Rica, ante la mirada incrédula de sus habitantes, pues consideran que nada sirve reforzar la presencia del ejercito, mientras no haya voluntad política para desarmar a los dos carteles en diputa como son Los Chapitos y La Mayiza.
Además, y de acuerdo a la opinión de muchos sinaloenses y en particular de los culichis, el gobernador del estado, Rubén Rocha Moya pretende lavarse las manos de la inseguridad, bajo el argumento utilizado por varios mandatarios estatales y municipales, de que este tipo de violencia debe ser combatido por las fuerzas federales.







