Leonel Durante López. Corresponsal
Chicomuselo, Chis., 31 jul (AMEXI).- A principios de esta semana, unos 400 pobladores de la comunidad Nuevo Reforma, en la zona Sierra, huyeron a causa de un ataque con drones cargados con explosivos, tentativamente lanzados por uno de los grupos del crimen organizado que se disputan el territorio de la Sierra y Frontera del estado.
Curiosamente el poblado colinda con el 101 Batallón de Infantería, sin que éstos, en apariencia, se percataran del incidente, señalan pobladores de la región, quienes aseguran que la bomba cayó en la cancha, ubicada en la zona centro, provocándoles terror y miedo, por lo que decidieron abandonar sus hogares.
Otro testimonio de los habitantes es que el ataque ocurrió cerca de las 10 horas del martes, luego de varios días de enfrentamientos. Como es natural, el explosivo lanzado desde un dron causó un estruendo, y, a partir de ese momento, huyeron de sus casas para refugiarse en otras comunidades que se ubican en la línea de la presa La Angostura.
Por la cercanía con la presa La Angostura, las familias huyeron a través de camionetas particulares y algunas motocicletas hacia el embarcadero de Leningrado, para después algunos cruzar el embalse en lanchas y resguardarse en casas solidarias del municipio de Tzimol.
La fuente recordó que hace más de una semana la cabecera municipal de Amatenango de la Frontera fue atacada bajo la misma mecánica, es decir, con drones cargados de explosivos, lo que provocó que otras 400 personas también huyeran de la violencia que generan grupos criminales hacia el país vecino de Guatemala.
En este sentido, centenares de habitantes de las comunidades han huido tanto a otras entidades del país como a Estados Unidos donde tienen familiares, dejando pueblos fantasmas a su paso, y que ahora se están apropiando los criminales, desgraciadamente solapados por las autoridades federales y estatales.
Desde el 12 de mayo, fecha que fue masacrada una familia en la comunidad de Piedra Labrada, la fuente asegura que han pedido a las autoridades federales y estatales, seguridad de los elementos 101 Batallón de Infantería del Ejército Mexicano, sin embargo, éstos “ni nos ven ni nos oyen”.
En el municipio de Chicomuselo, sus habitantes se han esfumado, y hay cientos de casas abandonadas, pero también existen una media docena de comunidades que se han quedado sin habitantes como si fueran “pueblos fantasmas”, tal es el caso de la comunidad de Piedra Labrada.







