Oscar Rodríguez, Corresponsal
Oaxaca. Oax., 4 jun (AMEXI).- Maestros de la sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) tomaron de manera indefinida las instalaciones del aeropuerto y cerraron la carretera Oaxaca-Puerto Escondido.
Ello, denunciaron los profesores, debido a que el Gobierno federal canceló la mesa de negociación que había acordado con los profesores para atender sus demandas, después del proceso electoral de 2 de junio.
También cerraron la carretera Oaxaca-Puerto Escondido como medida de presión para que las autoridades federales y estatales se sientes a dialogar con ellos, en el transcurso de esta cuarta semana de paro de labores.
Los docentes han cruzado vehículos pesados e impiden el acceso a la terminal aérea, por lo que los pasajeros tienen que caminar hasta 3 kilómetros para abordar sus vuelos o cruzar por el parque deportivo el Tequio para poder ingresar a la zona del aeropuerto que está prácticamente cercada por los inconformes.
La líder de la gremial Yenny Pérez consideró como mínimas e insuficientes las respuestas que ha otorgado el Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador y del local de Salomón Jara Cruz, a quienes reiteraron su exigencia de instalar una mesa resolutiva única para desahogar en definitiva los puntos que están atorados en las mesas de negociación.
Dijo que el receso, y levantamiento del paro y plantón en el centro histórico dependerá de una decisión de sus bases, y no de algunos de sus líderes.
«Si nuestras bases consideran que las respuestas que ha dado el gobierno no son las suficiente, mantendremos la jornada de protestas, con el amplio apoyo de nuestros compañeros que determinaron las estrategias a seguir, para que sean más contundentes las protestas”, destacó.
Dejó claro que su movimiento no se guía por determinaciones políticas o coyunturas electorales, advirtiendo que gobierne quien gobierne la CNTE no frenará sus movilizaciones.
En este sentido, declaró que ahora quien ganó los comicios del 2 de junio, en este caso Morena y su presidenta electa Claudia Sheimbaum, tendrán que medir la fuerza de los maestros de Oaxaca para darle respuesta a sus demandas si quiere gobernar este país.