Este 25 de octubre desde el Centro Espacial de Tanegashima, Japón, a las 18 horas tiempo de México, ocurrió el lanzamiento del cohete H3 que transportó al espacio el nanosatélite mexicano GXIBA-1, que servirá para el monitoreo de los volcanes activos en el mundo.
La Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP) logró con éxito la llegada al espacio de este nanosatélite, en colaboración con la Agencia Japonesa de Exploración Aeroespacial (JAXA).
De acuerdo con Agencia Espacial Mexicana (AEM), el equipo de México fue seleccionado en 2022 para desarrollar este nanosatélite en la sexta convocatoria del concurso internacional “KiboCUBE” de la JAXA y la Oficina de Asuntos del Espacio Exterior de la Organización de Naciones Unidas (UNOOSA-ONU).
La AEM es un organismo sectorizado de la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones (ATDT), la cual, para este proyecto, consiguió la posición orbital.

Será parte del monitoreo y exploración de volcanes activos
El director de proyectos aeroespaciales de UPAEP, Eugenio Urrutia Albisua explicó que la misión del GXIBA-1 se inscribe en el programa Monitoreo y Exploración de Volcanes Activos (MEVA).
“La misión social MEVA es el monitoreo de cambios en gases volcánicos como dióxido de carbono y de azufre, especialmente en el Popocatépetl, que apoyen a los científicos a predecir erupciones y proteger a las comunidades vulnerables de México”, señaló.
Para la recolección y análisis de estos datos, el talento mexicano programó componentes y sensores en el dispositivo, y con desarrollo de algoritmos de inteligencia artificial, como Machine y Deep Learning, se identificarán patrones y tendencias en el comportamiento volcánico.
El proyecto GXIBA-1 lo forman 25 alumnos y seis profesoresde ingenierías Aeroespacial, Electrónica, Software y Mecatrónica, así como de las carreras de Derecho, Mercadotecnia, Diseño, Comunicación y Administración.
Pero este nanosatélite no fue el primero, pues antes estuvo el satélite el AztechSat-1, que sirvió de experiencia en proyectos espaciales con estándares internacionales.
El “GXIBA-1” toma su nombre del zapoteco que significa Universo o Estrellas.
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