La Embajada de Estados Unidos en México emitió una advertencia contundente: ciertas áreas de la frontera sur se designaron como zonas de defensa nacional, consideradas extensiones de bases militares estadounidenses.
La medida implica que cualquier persona no autorizada que ingrese a estas zonas será multada, arrestada, enjuiciada y encarcelada.
El anuncio, difundido en redes sociales, está acompañado de imágenes de militares colocando avisos en la valla fronteriza.
En ellos se lee: «No entres. Arriesgas tu libertad en un viaje destinado al fracaso». La decisión se enmarca en una serie de acciones del gobierno de Donald Trump para reforzar la seguridad fronteriza y disuadir la migración irregular.
⚠️ ADVERTENCIA
🇺🇸 ha designado ciertas áreas de la frontera sur de Estados Unidos como áreas de defensa nacional. Estas se consideran extensiones de bases militares de 🇺🇸 y cualquier persona no autorizada que ingrese en estas zonas será objeto de multa, arresto, enjuiciamiento… pic.twitter.com/NI2uQjH7AG— Embajada EU en Mex (@USEmbassyMEX) May 22, 2025
Implicaciones y reacciones
La designación de estas áreas como zonas de defensa nacional permite a las fuerzas armadas actuar directamente en la frontera, lo que podría exacerbar las tensiones migratorias.
Expertos en derechos humanos han expresaron preocupación por el impacto de estas medidas en los migrantes y solicitantes de asilo.
📢Adherirse a las leyes de EE.UU. es esencial para mantener tu estatus migratorio.
🚨 No pongas en riesgo tu visa de EE.UU. por una mala decisión.
Si consumes sustancias ilegales, manejas bajo los efectos del alcohol o violas cualquier ley en Estados Unidos, puedes enfrentar:… pic.twitter.com/sdvTsp0mA5
— Embajada EU en Mex (@USEmbassyMEX) May 22, 2025
Un endurecimiento progresivo
Desde febrero, Estados Unidos ha incrementado la presencia militar en la frontera, desplegando miles de soldados para reforzar la vigilancia y contener el flujo migratorio.
Además, el gobierno estadounidense ha implementado sanciones económicas para quienes permanezcan en el país tras recibir una orden de deportación, con multas que pueden alcanzar los 998 dólares por día.
La comunidad internacional observa con atención el desarrollo de estas políticas, mientras organizaciones de derechos humanos advierten sobre los riesgos que enfrentan los migrantes en su intento por cruzar la frontera.