Ciudad de México, 18 may. (AMEXI).- La hipertensión es una enfermedad crónico-degenerativa que afecta a 30 por ciento de la población en México, donde la padecen unos 30 millones de personas, de los cuales, la mitad desconoce que tiene esta condición y vive sin diagnóstico.
En el marco del Día Mundial de la Hipertensión, que se celebra cada 17 de mayo, especialistas de la sala de Hemodinámica y del Servicio de Cardiología Intervencionista del Hospital General Tacuba advirtieron de los riesgos de daño multiorgánico por este padecimiento.
“La hipertensión arterial sistémica (HAS) puede durar muchos años sin generar síntomas”, pero es la principal causante de muerte y discapacidad por eventos cardiovasculares adversos, indicaron.
Señalaron que puede causar daños en órganos como el corazón, el cerebro, los riñones, los ojos y en el aumento de eventos cardiovasculares adversos como infartos cerebrales y del corazón, además de que se han incrementado los pacientes con insuficiencia renal y los casos de retinopatía hipertensiva y daño visual.
Para abatir el impacto de esta patología, el ISSSTE centra sus esfuerzos en detectarla y tratarla de manera temprana, así como en identificar y evitar complicaciones a largo plazo para brindar mejor calidad de vida a pacientes.
Entre los predisponentes para desarrollar hipertensión arterial, mencionó la edad, pues alrededor de la quinta década de la vida el riesgo aumenta; el estilo de vida, por sedentarismo, malos hábitos dietéticos, alta ingesta de grasas y, en algunas personas, por consumir sal en exceso.
Indicó que a la hipertensión se le ha relacionado con el desarrollo simultáneo de otras comorbilidades como diabetes mellitus, dislipidemia y tabaquismo, debido a que comparten factores de riesgo del estilo de vida.
El organismo mencionó que la próxima campaña “¿Ya PrevIssste? ¡Ya la hiciste!” estará dirigida a reducir el consumo de azúcar y promover activación física.
El ISSSTE subrayó que además realiza todo el año las jornadas ECOS para el Bienestar en centros de trabajo de diferentes dependencias y comunidades abiertas para la detección oportuna de enfermedades crónicas como diabetes, obesidad e hipertensión arterial.
También, proporciona asesoría nutricional, promueve la activación física en todas las etapas de la vida e imparte pláticas de sensibilización sobre lo grave que puede resultar esta enfermedad cuando no se trata adecuadamente.
El ISSSTE recomendó que toda persona mayor de 40 años acuda a chequeo médico anual y se realice periódicamente la medición de la presión arterial. “Si su presión arterial es mayor a 140/90 y tiene factores de riesgo como diabetes mellitus, dislipidemia, tabaquismo o antecedentes familiares de hipertensión, debemos iniciar un tratamiento”, apuntó.
