Este jueves 27 de noviembre de 2025, la agenda mediática y cultural gira en torno a una celebración que define la identidad norteamericana: el Día de Acción de Gracias, que es mucho más que una cena familiar: es un motor económico y un evento histórico lleno de matices que, con el paso del tiempo, ha extendido su influencia hasta México y el resto del mundo.

De la cosecha de 1621 a la ley de 1941
El relato fundacional nos sitúa en 1621 en Plymouth, Massachusetts, donde los colonos ingleses y el pueblo Wampanoag compartieron alimentos tras una cosecha exitosa.
Sin embargo, la institucionalización de la fecha fue un proceso político largo. Fue Abraham Lincoln quien, en 1863, proclamó la festividad a nivel nacional.
Décadas más tarde, tras algunos cambios controversiales promovidos por Franklin D. Roosevelt, el Congreso de Estados Unidos fijó por ley en 1941 que la celebración ocurriría invariablemente el cuarto jueves de noviembre.

El fenómeno del Viernes Negro
La festividad marca también el disparo de salida para el consumo masivo. Justo al día siguiente del Día de Acción de Gracias tiene lugar el famoso «Viernes Negro» o Black Friday.
Originalmente, este término fue acuñado por la policía de Filadelfia en los años 50 para describir el caos vial que abarrotaba la ciudad, pero hoy hace referencia al momento financiero en que los comercios pasan de «números rojos» (pérdidas) a «números negros» (ganancias) debido a las ofertas agresivas que inauguran la temporada navideña.

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Tradiciones y diplomacia del pavo
El pavo es el símbolo central, con un consumo estimado de 40 millones de unidades en Estados Unidos sólo en esta fecha.
La tradición alcanza las esferas más altas del poder: desde 1989, con el presidente George H.W. Bush, se formalizó la ceremonia del «indulto presidencial», donde el mandatario perdona la vida a un pavo en la Casa Blanca, añadiendo un toque mediático al Día de Acción de Gracias.

La festividad en el contexto de México
Aunque no es un día feriado oficial en México, la cercanía geográfica ha hecho que la fecha cobre relevancia en territorio nacional. En las ciudades fronterizas y en destinos turísticos clave como Cancún o Los Cabos, es común que restaurantes y hoteles ofrezcan cenas especiales.
Además, diversos sectores religiosos aprovechan la ocasión para realizar servicios de gratitud. La influencia cultural ha logrado que el Día de Acción de Gracias se integre paulatinamente en ciertas regiones, adaptando muchas veces el menú al paladar local con toques de chile y especias mexicanas.

La perspectiva crítica
Pero la fecha no es de celebración para todos, pues grupos de nativos americanos conmemoran este día como el Día Nacional de Luto, recordando en lugares como Cole’s Hill las tragedias y el despojo territorial que sufrieron sus ancestros tras la llegada de los europeos, una visión que contrasta con la idealización histórica del Día de Acción de Gracias.







