Primera de dos partes
Ciudad de México, 4 may. (AMEXI).- Niños y adolescentes en México están gravemente afectados por las situaciones que se suscitaron durante la pandemia de Covid-19, por un encierro de más de tres años que robó años de vida y desarrollo a los jóvenes, provocó notorios rezagos educativo y, más grave aún, que una de las etapas más importantes del ser humano como es la adolescencia se trastornara.
En los niños de nueve a 12 años de edad se ha detectado una adolescencia anticipada, mientras que los jóvenes de 15 manifiestan una adolescencia extendida que en algunos casos alcanza hasta los 20 años de edad; lo lamentable es que en ambos casos quedó detenido el desarrollo emocional y afectadas sus fortalezas para avanzar en la vida.
A lo anterior se suma una terrible adicción, que ya reconoció la Organización Mundial de la Salud (OMS), a los videojuegos y a vivir en un mundo digital, porque el mundo real para ellos es muy lento, precisó en entrevista con AMEXI Mary Carmen Cabrera, presidenta y fundadora de BusinessKids.
Esta la franquicia mexicana creada en 2009 por ella y que actualmente tiene presencia en 27 países, tiene como fin promover programas de emprendimiento infantil, fortalecer los valores y a encauzar la vocación de los menores de edad para que logren lo que quieran ser en la vida.
Este programa se basa en un modelo psicopedagógico y de negocios, cuyos pilares son: la autoestima, la autoconfianza y el fortalecimiento de la inteligencia emocional.
“Si tú creces con esos tres escudos protectores, todos los problemas te hacen los mandados porque tienes la fortaleza interior para enfrentarte a la vida”, aseveró Cabrera.
El reto es que el niño regrese al mundo real
Citó que la transformación de los infantes pospandemia es algo que mucha gente no ve, como que más del 30 por ciento son adictos a los videojuegos, como consecuencia de la soledad que vivieron en ese periodo; por eso el primer paso que se da en este modelo educativo es la desintoxicación digital de los menores de edad.
“Tú no puedes pedirle a un niño que suelte un dispositivo cuando no está encontrando nada afuera y nada dentro de sí mismo. El reto que tenemos es justamente la desintoxicación y que el niño regrese al mundo real”.
La soledad que experimentaron los chicos y no interactuar con sus pares les provocó una adolescencia anticipada; muchos de ellos, incluso con el consentimiento de los padres, se refugiaron en los videojuegos, mientras que las niñas, de 12 años principalmente, se crearon un mundo en las redes sociales. Por eso el mundo que conocen es el digital.
“Estos niños tienen una adolescencia anticipada porque tienen estímulos por todos lados y están entrado a un mundo de violencia muy fuerte porque la mayor parte de los videojuegos son violentos”, advirtió.
Mary Carmen Cabrera también explicó que el cerebro de una persona de 6 años no distingue si está matando en la vida real o si se tratas de un juego, entonces, es como si se entrenara para matar. Además, las luces que se desprenden de los dispositivos generan adicción.
En el caso de los adolescentes, esta etapa de la vida se extendió y ahora hay muchos jóvenes de casi 20 años que actúan como si tuvieran 16 o 17, lo que preocupa mucho a los padres.
El grave problema es que estos individuos con 20 años de edad no son capaces de tomar decisiones y muchos no saben qué estudiar o cuál es su vocación, pues la pandemia detuvo su desarrollo.
“Les quitamos tres años de evolución, es decir, la transición de la infancia a la adultez, por lo cual hay que tener paciencia”, mencionó.
Es por eso que se abrió el programa de BusinessTeens, que consta de 100 horas y donde además de reforzar sus valores y desintoxicarlos de la adicción digital, reciben clases de desarrollo empresarial, orientación vocacional, responsabilidad social, cómo cuidar el dinero y sus finanzas, ecología, cuidado del ambiente, trabajo en equipo, al tiempo que se les inculca un pensamiento global, “coaching” y relaciones públicas, entre otros rubros.
