Morena respalda Comisión presidencial de Reforma Electoral; PAN y PRI anuncian extrañamiento
El gobierno de Sheinbaum oficializa comisión para la Reforma Electoral encabezada por Pablo Gómez; oposición denuncia un “club de cuates” y advierte riesgo autoritario
Este 5 de agosto de 2025, la presidenta Claudia Sheinbaum oficializó la creación de la Comisión Presidencial para la Reforma Electoral, designando a Pablo Gómez Álvarez —ex titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF)— como su coordinador. La decisión desató reacciones encontradas: la bancada de Morena en San Lázaro respaldó la medida, aunque reconoció que lo ideal sería un consenso amplio; mientras que la oposición, principalmente PAN y PRI, lanzó duras críticas, señalando falta de pluralidad y participación ciudadana, y adelantaron un extrañamiento formal.
Morena apoya Comisión presidencial de Reforma Electoral
El líder de los diputados de Morena, Ricardo Monreal, expresó su respaldo a la creación de la comisión, pero subrayó que lo óptimo es lograr una reforma electoral con participación de todas las fuerzas políticas.
“Respetamos la decisión de la presidenta de optar por esta vía. Participaremos donde nos inviten, conscientes de que seremos receptores de la propuesta”, señaló Monreal, quien vaticinó un camino largo y complejo que requerirá consenso.
Destacó que Pablo Gómez es una persona con experiencia, honestidad y congruencia histórica en la política mexicana.
Además, anunció que la comisión convocará a foros públicos para incluir diversos sectores en el debate.
La Presidenta @Claudiashein designó a @PabloGomez1968 como Presidente de la Comisión para la Reforma Electoral.
Se trata de una causa prioritaria para la Cámara de @Mx_Diputados, por lo que estaremos preparados y atentos para aportar nuestras opiniones. pic.twitter.com/8FVm0uge83— Ricardo Monreal A. (@RicardoMonrealA) August 3, 2025
PAN advierte “regresión autoritaria” y extrañamiento a Sheinbaum
La dirigencia nacional del PAN y sus coordinadores parlamentarios, Elías Lixa y Ricardo Anaya, criticaron duramente la creación de la comisión al considerarla una vulneración a la separación de poderes.
Acusaron que el órgano pretende sustituir al Congreso como espacio natural de deliberación, poniendo en riesgo un sistema electoral construido con diálogo plural y consenso.
“Pretender conducir una transformación electoral desde el Ejecutivo, sin diálogo ni contrapesos, es un intento de regresión autoritaria”, sentenciaron.
El PAN anunció que presentará un punto de acuerdo en la Comisión Permanente para:
- Extrañar a la presidenta Sheinbaum por crear la comisión sin pluralidad ni participación ciudadana.
- Exhortar al Congreso a formar una comisión plural con legisladores, sociedad civil, especialistas y autoridades electorales.
El dirigente nacional panista, Jorge Romero, difundió su propia propuesta de reforma que incluye:
- Segunda vuelta presidencial
- Elecciones primarias
- Nulidad de elección si hay crimen organizado
- Voto electrónico
- Gobiernos de coalición
- Eliminación de la sobrerrepresentación
Romero enfatizó que México necesita una reforma que fortalezca la democracia, no “una hecha a modo del poder”.

PRI denuncia “club de cuates” y alerta por “golpe electoral”
El coordinador priista en San Lázaro, Rubén Moreira, lamentó que por primera vez en 48 años una reforma electoral no nazca de la sociedad ni de las oposiciones, sino del gobierno.
Calificó a la comisión como un “club de cuates” que no genera confianza.
“Lo que se va a discutir son las reglas de la contienda democrática, donde están quienes gobiernan y quienes no, porque esto no es una monarquía”, advirtió.
Moreira planteó que la iniciativa parece un “golpe de Estado electoral, Legislativo Electoral”, lanzando una seria advertencia sobre los riesgos para la democracia.
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Un momento decisivo para la democracia mexicana
Las reformas electorales en México han sido tradicionalmente resultado de pactos y consensos amplios, con la participación del Congreso, partidos, autoridades electorales y sociedad civil.
El proceso iniciado por la Comisión Presidencial bajo la conducción directa del Ejecutivo rompe con esta tradición, lo que da pie a la desconfianza y alertas sobre posibles riesgos a la pluralidad y a la autonomía de las instituciones.