En México, cada año, miles de personas fallecen en cuestión de minutos víctimas de muerte súbita cardiaca. Algunos pacientes presentan síntomas poco antes de que ocurra el evento, lo que evidencia la importancia de la prevención y la atención médica para prevenir ese desenlace.
La crisis de las enfermedades del corazón está en aumento y se consolida como la principal causa de muerte, tanto a nivel mundial como en México. Estas enfermedades causan 20.1% de los fallecimientos totales, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). La Alianza Contra la Muerte Súbita Cardiaca en México informa que 95% de los casos resultan en fallecimiento en cuestión de minutos.
¿Qué es la muerte súbita cardiaca?
La muerte súbita cardiaca (MSC) ocurre de manera inesperada cuando el corazón deja de latir, interrumpiendo el flujo de sangre hacia el cerebro y otros órganos vitales. Las causas más frecuentes incluyen arritmias cardiacas, enfermedades coronarias y anomalías estructurales del corazón. Estos padecimientos pueden afectar a personas de cualquier edad, aunque los factores de riesgo, como hipertensión, diabetes, sobrepeso o antecedentes familiares, aumentan su incidencia.
El doctor Manlio Fabio Márquez Murillo, cardiólogo electrofisiólogo y coordinador de la alianza por parte de la Sociedad Interamericana de Cardiología, explica:
“La muerte súbita cardiaca es un problema de salud pública a nivel mundial. Se presenta en diferentes poblaciones y representa al menos entre 20 y 30% de los decesos de origen cardíaco. Por ejemplo, en Estados Unidos ocasiona entre 7 y 18% de los decesos totales. En México desconocemos la incidencia exacta de la muerte súbita cardiaca o paro cardiaco súbito”.
Acciones para salvar vidas
La intervención médica inmediata es crucial para aumentar las probabilidades de supervivencia. El 95% de quienes experimentan un paro cardíaco súbito fallecen en minutos si no reciben maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) o procedimientos con desfibriladores automáticos.
Ante esta situación, la Alianza Contra la Muerte Súbita Cardiaca impulsa, entre otros, el programa “Salva una vida sólo con las manos”, que capacita a instructores en resucitación cardiopulmonar. Además, iniciativas como el Programa Carreras Cardioprotegidas, coordinado por la Sociedad Mexicana de Cardiología, buscan promover la importancia del cuidado del corazón durante la práctica deportiva.
Lee: ¡Cuida tu corazón! Si tienes diabetes, está en riesgo
Otros programas destacados incluyen:
- Referencia oportuna al electrofisiólogo (SOMEEC): Para detectar factores de riesgo y anomalías cardíacas a tiempo.
- Cadena de supervivencia: Una campaña para mejorar la respuesta ante emergencias cardíacas.
- Escuelas cardioprotegidas: Enfocado en prevenir la muerte súbita en niños y jóvenes mediante capacitación en RCP y el uso de desfibriladores automáticos en instituciones educativas.
Con el respaldo de organizaciones como Boston Scientific, estas iniciativas trabajan para reducir las muertes por enfermedades cardiovasculares y generar conciencia en la población sobre la importancia de la prevención y atención temprana.
