Mientras miles de peregrinos caminan movidos por una fe inquebrantable hacia la Virgen de Guadalupe, a su lado marchan silenciosos otros devotos: sus perros.
Ellos no entienden de promesas religiosas ni de milagros, pero su devoción es igual de poderosa; los mueve una lealtad absoluta hacia sus dueños.
Al igual que los fieles, muchos de estos perritos peregrinos provienen de estados vecinos como Puebla, Hidalgo y el Estado de México, recorriendo enormes distancias junto a las caravanas.
Es desgarrador pensar que esa misma lealtad es recompensada, en demasiados casos, con la soledad de una calle desconocida en la capital al terminar la jornada.

Huellas de dolor: así llegan al Tepeyac
El costo físico de esta travesía es brutal. Las brigadas veterinarias reportan un cuadro clínico recurrente y doloroso en los animales que arriban tras caminar cientos de kilómetros desde la provincia:
- Cojinetes abrasados: Sus patas presentan quemaduras graves y sangrado por el contacto continuo con el asfalto caliente o helado de la carretera.
- Deshidratación extrema: Llegan al límite de sus fuerzas, a menudo colapsando por falta de agua durante los tramos largos de autopista.
- Desnutrición severa: Muchos ya presentaban hambre crónica antes de iniciar el viaje, lo que agrava su debilidad al llegar a la CDMX.
- Estrés y desorientación: El ruido de la pirotecnia y las multitudes los aterrorizan, separándolos de sus dueños o dejándolos vulnerables a atropellamientos.

La realidad hoy: 11 de diciembre
La emergencia sucede ahora mismo. Por el momento, en este 11 de diciembre, la Agencia de Atención Animal (AGATAN) ha reportado la atención de 5 canes, de los cuales 2 se encuentran graves con heridas significativas y requirieron traslado urgente al Hospital Veterinario.
Sin embargo, el panorama es amplio y alarmante. Para dimensionar la crisis, basta mirar las cifras oficiales: durante el operativo del año pasado (2024), se estimó que entre 150 y 200 perros fueron abandonados en las inmediaciones del recinto mariano. Si no intervenimos, este patrón de crueldad se repetirá en las calles de la Gustavo A. Madero.

El abandono es un delito: la ley los protege
La crueldad tiene consecuencias legales claras en nuestra capital. La Ley de Protección a los Animales de la Ciudad de México y el Código Penal establecen un marco jurídico firme, cuya constitucionalidad fue ratificada recientemente por la Suprema Corte de Justicia en enero de 2025.
Los artículos 350 Bis y 350 Ter del Código Penal sancionan el maltrato y la crueldad. Abandonar a un animal en la vía pública, exponiéndolo a riesgos que comprometan su bienestar o su vida, conlleva penas que van de 6 meses a 2 años de prisión, sanciones que pueden incrementarse de 2 a 4 años si el animal muere a causa de este abandono. La ley existe para garantizar su trato digno; ignorar su sufrimiento es un acto que no queda impune.

Manos a la obra: Operativo Perrito Peregrino 2025
Tu ayuda es urgente. Del 08 al 13 de diciembre, puedes cambiar el final de esta historia sumándote al Operativo Perrito Peregrino 2025. Las autoridades y la sociedad civil necesitan apoyo en las siguientes áreas:
- Hogares temporales: Ofrece un espacio seguro mientras se les busca familia definitiva.
- Voluntariado: Apoya en las guardias nocturnas o paseando a los perros resguardados.
- Acopio: Se necesita alimento, agua y materiales de curación.
- Difusión: Ayuda a promover sus fotos para que estos perritos peregrinos: encuentren un hogar.
Para colaborar o reportar, contacta a coordinacion.agatan@gmail.com o ajvillagran@sedema.cdmx.gob.mx. Hagamos que la compasión sea el verdadero milagro de estas fechas.
Lee: ¿En qué consiste el operativo Basílica 2025?
Así estamos revisando a los perritos peregrinos 🐾🩷✨ #operativoperritoperegrino2025 @GobCDMX @ClaraBrugadaM @AnaJVillagran pic.twitter.com/6ItlQkVE1h
— Agencia de Atención Animal (@AgatanCdmx) December 11, 2025






